En medio de lágrimas, Kuniaki Murakami renunció a su cargo como director del Servicio Departamental de Salud (Sedes) de Pando, afirmando que a partir de ahora, luchará desde “la línea del frente” contra el coronavirus, a quienes atenderá directamente en la ciudad de Cobija.
“Me despido de esta prestigiosa institución para ir a la línea de frente, a la lucha contra este enemigo invisible (…) no es un adiós sino un hasta pronto. Me comprometo conmigo mismo, con mi Dios que es el que me guía en mi camino, en intentar llegar a la casa de cada uno de los infectados”, expresó Murakami.
En conferencia de prensa, el joven galeno leyó su carta de renuncia con gafas y un barbijo que cubrían las lágrimas en su rostro. En su discurso, instó a la solidaridad de la población para que ayuden con medicamentos e insumos a los que están atravesando esta enfermedad.
“Voy a acudir a su domicilio a tratar a aquellos pacientes que más lo necesitan, (pero) esto no podré hacerlo solo; por ello acudo a los corazones solidarios para que ayuden con medicamentos”, indicó.
Y agregó que dejó un plan de contingencia, que deberá ser aplicado durante la emergencia sanitaria para frenar el avance de la enfermedad en Pando.
“Estamos dejando un nuevo plan estratégico para tres meses; caso contrario, no me iría. Este plan, que debe ser ejecutado a cabalidad, para que de esta manera se pueda llegar a disminuir el contagio masivo de la población”, subrayó.
En las últimas semanas los casos de coronavirus en el departamento pandino comenzaron a crecer generando zozobra en la población y autoridades sanitarias. Al 8 de junio, Pando registró 65 casos positivos.