El 17 de julio Tarija superó los 2.000 casos de Covid-19, de los cuales, el 62 por ciento de los detectados están en Cercado y la proyección es que la propagación del virus continúe, mientras el Comité Operativo de Emergencia Departamental (COED) revisa la estrategia de lucha contra la enfermedad.
El último reporte da cuenta de 155 casos nuevos, por lo que el total acumulado ascendió a 2.028 pacientes, de los cuáles: 1.894 están activos, 78 recuperados y 56 fallecidos.
Si se mira la cantidad de diagnosticados por municipios, se observa que Cercado concentra el 62 por ciento (1.266 casos), 14 por ciento en Yacuiba (292), siete por ciento en Villa Montes (133) y las demás jurisdicciones en menor cantidad, 337 pacientes juntos.
Para esta fecha se revertió el número de fallecidos frente a los recuperados por la enfermedad de Covid-19. Los pacientes que negativizaron al virus subieron de 49 a 78 en un solo día. Mientras que la cantidad de fallecidos quedó en 56.
Sobre los recuperados, el director del Sedes, Paúl Castellanos, explicaba que la casuística mostraba que los pacientes tardan más de 14 días en recuperarse, periodo que generalmente se recuperan las personas en otros lugares.
En ese sentido, la epidemióloga del Sedes, Claudia Montengro, refería que la cantidad de recuperados en cualquier momento podía aumentar de manera de manera vertiginosa. Finalmente, eso sucedió el 17 de julio, en un solo día reportaron que 29 personas vencieron al virus.
En cuanto a la afectación de los municipios, pero medido en tasas, se observa que en el valle central, Cercado y Uriondo, son los que tienen más incidencia de la enfermedad: 47,1 y 43,6 por cada 10 mil habitantes respectivamente. Mientras que, en el Chaco, Caraparí es el más flagelado por el virus, pues, por cada 10 mil habitantes 30,6 adquirieron el Covid-19.
En cuanto a los fallecidos, ocho municipios reportaron óbitos atribuidos al Covid-19. El total acumulado en el departamento es de 56: 39 en Cercado, uno en Bermejo, siete en Yacuiba, cinco en Villa Montes, uno en Uriondo, uno en San Lorenzo, uno en El Puente y uno en Entre Ríos.
El crecimiento de casos de Covid-19 creció a tal punto que el laboratorio de biología molecular del Sedes no puede cubrir la demanda diaria. Por ejemplo, en esta semana no pudieron bajar de 400 la cantidad de muestras que quedan pendientes de laboratorio, incluso, se llegó a sobrepasar los 500.
Esa situación llevó al Comité Operativo de Emergencia Departamental (COED) a revisar la estrategia de rastreo y diagnóstico. Hasta el cierre de edición, una de las propuestas era aplicar un protocolo para validar los casos positivos a partir de pruebas de anticuerpos o test rápidos, y su tratamiento a través de síntomas específicos.
También se tenía para analizar el método “pool testing”, que somete a un grupo de contactos íntimamente relacionados al mismo reactivo para después tomar las medidas de tratamiento pertinente en función de los síntomas.
La cuestión es que el ritmo epidemiológico muestra que continuará la escalada de casos en todo el departamento. Por eso las autoridades de salud piden no aflojar las medidas de prevención, como es el aislamiento social, el uso de barbijo, lavado frecuente de manos o uso de alcohol en gel, la desinfección y no tocarse la cara
Castellanos explicó que últimamente se habla de que la carga viral es mayor cuando se trata de ambientes cerrados, por lo que en esos lugares hay mayor probabilidad de contraer la enfermedad. Reitera que el peligro no pasó, al contrario, la propagación continúa en todo el departamento. Y es cuando más cuidados se debe tener.
El País