El líder opositor ruso agradeció a los médicos de haberlo hecho pasar de ser un “hombre técnicamente vivo” a iniciar su recuperación.
El líder opositor ruso Alexei Navalny habló este sábado (19.09.2020) sobre su convalecencia y sus momentos difíciles para volver a aprender a expresarse y caminar en el hospital de Berlín, donde es tratado de su supuesto envenenamiento con un agente neurotóxico.
“Voy a contar cómo se produce mi restablecimiento. Ya no hay obstáculos en mi camino, pero será aún algo largo”, escribió en un mensaje en Instagram, junto a una foto en la que aparece de pie, con atuendo deportivo, bajando una escalera.
El 20 de agosto, este feroz crítico del Kremlin fue víctima de un grave malestar a bordo del avión que lo llevaba a Moscú desde Siberia. Tras pasar dos días en un hospital ruso, fue llevado a Alemania y hospitalizado en coma en Berlín.
Un laboratorio militar alemán confirmó el 3 de septiembre su envenenamiento por una sustancia del tipo Novichok, concebida para fines militares en la época soviética, lo que Moscú refuta.
“Mis problemas actuales -como el hecho de que un teléfono sea tan inútil como una piedra en mis manos- son solo tonterías”, indicó Alexei Navalny en su mensaje.
En efecto, hasta hace “poco tiempo”, este militante anticorrupción no reconocía a nadie y no podía responder al médico que venía a ayudarlo a reaprender a expresarse cada mañana.
“Me desesperaba porque entendía lo que quería el doctor, pero yo no sabía dónde encontrar las palabras”, describe Navalny. Ahora, afirma, está recuperando progresivamente el uso de su cerebro.
“Ahora soy un tipo que tiene las piernas que tiemblan cuando sube las escaleras”, pero que se dice a sí mismo “aquí hay una escalera. La usamos para subir, pero será mejor que encuentre un ascensor”, bromeó.
Navalny ya había publicado el martes un primer mensaje, diciendo que había podido respirar sin asistencia, durante toda una jornada.
Respirar “me encantó, es un sorprendente procedimiento y subestimado por muchos, lo recomiendo” había afirmado con humor, publicando una foto en la que se lo ve sentado en su cama de hospital, junto a su mujer y sus hijos.
DW.
