Bolivia reportó 26 incendios forestales, 17 de los cuales se encontraban en el departamento de Santa Cruz hasta este domingo, de acuerdo con los datos de la Autoridad de Fiscalización, Control Social de Bosques y Tierra (ABT).
El director nacional de esta entidad, Víctor Hugo Áñez, quien entregó esta información durante una entrevista con el programa Asuntos Centrales de Radio Marítima, señaló que la emergencia aún no rebasado las capacidades institucionales para luchar contra el fuego.
Áñez explicó que los vientos y la escasez de lluvia en varios municipios de la Chiquitania dificultaron las tareas orientadas a aplacar el avance del fuego, aunque se mostró esperanzado por la posibilidad de la llegada de lluvias, previstas para esta semana.
“Tenemos toda la capacidad logística de la ABT en este momento desplegada en todo el territorio donde hay incendios a nivel nacional, sobre todo en Santa Cruz”, señaló y aclaró que a pesar de las actuales condiciones no se perdió el control de la crisis.
En todo caso, la preocupación está en la provincia cruceña de Cordillera, donde el fuego trepó a una zona de quebradas y montañas, lo que ha complicado que éste pueda ser sofocado; de igual manera en Lagunillas y Sararenda existen incendios que se propagaron con los vientos.
“No podemos hablar de ningún descontrol; no queremos que la gente se maneje por informaciones falsas, no queremos que se genere una corriente de desesperación” remarcó Áñez, quien anticipó un relevamiento en todo el territorio nacional.
Hasta este fin de semana algo más de un millón de hectáreas de bosque fueron devastadas por los incendios forestales, una cifra que está por debajo de los cuatro millones de hectáreas que se incendiaron en 2019.
El viceministro de Defensa Civil, Luis Gerardo Tellaeche, informó que el Gobierno contrató un avión cisterna C-130 para controlar los incendios y precisó que este año el fuego llegó a zonas donde los incendios no lograron afectar el año pasado.
ABI