Un centenar de guardias dará seguridad en los 23 cementerios durante el feriado en Santa Cruz

El 1 y 2 de noviembre, festividad de Todos Santos y el Día de los Difuntos, unos 100 guardias municipales serán desplazados a los 23 cementerios bajo la administración de la Alcaldía, para brindar seguridad a la población.

El secretario municipal de Seguridad Ciudadana, Carlos Méndez, informó que estos funcionarios se encargarán de hacer cumplir las normas municipales y las medidas de bioseguridad.

“Se contará con la presencia de 100 guardias distribuidos en los 23 cementerios. También habrá un equipo de Espacio Público, que realizará el control de los asentamientos y ambulantes fuera y dentro de los cementerios y vigilarán, además, el ingreso de bebidas alcohólicas”, señaló Méndez, a tiempo de agregar que ante cualquier emergencia se tendrá la presencia de los bomberos y paramédicos. Además contarán con el apoyo de las ambulancias del Sisme.

Con el fin de que la gente tenga más de tiempo, el Gobierno Municipal determinó ampliar hasta el 31 de octubre el plazo para el arreglo de sepulturas y también suspendió la exigencia del pago en las tasas de mantenimiento, por lo que ahora si tiene deudas pendientes por este concepto igualmente puede limpiar, arreglar o ejecutar refacciones en los nichos y mausoleos.

Asimismo, la municipalidad confirmó que las visitas a los cementerios por la festividad del Día de Difuntos serán los días 1 y 2 de noviembre, cumpliendo con un protocolo de bioseguridad para evitar el contagio del coronavirus. Tampoco se permitirá ingresar con alimentos.

En primera instancia se había fijado el 28 de noviembre como fecha límite para las mejoras de las tumbas y mausoleos, pero por instrucción de la alcaldesa interina, Angélica Sosa, el plazo se extendió tres días, informó ayer el director municipal de Cementerios, Ronald Romero.

Esto también obligó a reducir, de tres a solo dos jornadas, los días para que los dolientes visiten a sus difuntos en los distintos camposantos de la ciudad.

“Se ha ampliado la fecha para hacer los arreglos hasta el 31 de octubre, justamente para que el ciudadano pueda hacer refacciones y limpieza de sus mausoleos y ya no es un requisito que estén al día en las tasas para hacer los trabajos, por lo que pueden apersonarse a los cementerios y remozar las tumbas”, señaló Romero, que ayer estuvo desde temprano supervisando las actividades que se desarrollan en las distintas necrópolis con miras al Día de Difuntos.

Debido a la pandemia de coronavirus, la Alcaldía Municipal tiene un protocolo que establece todas las medidas que se deben cumplir para ingresar y permanecer en los camposantos el 1 y 2 de noviembre, entre ellas que las visitas serán en horario continuo, de 7:00 a 21:00, y se deberá portar barbijo de forma obligatoria, además que se recomienda llevar alcohol en gel y guardar distanciamiento físico.

En este sentido, la secretaria municipal de Salud, Marisabel Vaca, adelantó que se pondrán a disposición brigadas médicas para hacer control de temperatura y de los mecanismos de protección en los distintos cementerios.

“El objetivo es garantizar la bioseguridad, por lo que instamos a la población el cumplimiento de las normas. Los controles serán estrictos porque si no se cumplen con las medidas, ingresar a un camposanto donde hay tantas personas, sería atentar contra la salud”, manifestó Vaca.

Las autoridades sanitarias recomiendan también que, en caso de presentar algún malestar, como fiebre y tos, evite acudir a los camposantos y vaya de inmediato a un centro sanitario para recibir asistencia médica oportuna.

Las prohibiciones y la seguridad en el Día de Difuntos tienden a desplazar las costumbres de la gente en los cementerios de la ciudad, pero son necesarias. Este año solo se permitirá el ingreso de flores y velas para evitar excesos que puedan empañar esta celebración y también para minimizar el contagio de coronavirus.

Las autoridades de la comuna han informado que no se permitirá ingresar con alimentos, es decir, que no se podrá llevar ‘gustitos’ a los difuntos, como se solía hacer antes cuando la gente llevaba comida, pan y hasta chicha a sus fallecidos.

Tampoco están permitidos los musicones, es decir, no se puede llevar equipos de música ni contratar mariachis, ni el ingreso y consumo de bebidas alcohólicas.

“Recomendar a la gente que no llegue con bebidas ni musicones ni alimentos a los cementerios porque se harán decomisos inmediatos”, advirtió el director municipal de Cementerios.

Tampoco se permitirá la venta de productos por vendedores ambulantes dentro y en los alrededores de los camposantos. Además, está prohibido el funcionamiento de locales nocturnos y venta de bebidas alcohólicas por normativas municipales y nacionales.

Paralelamente a las tareas que realizan los dolientes o los albañiles en las sepulturas, personal de la comuna trabaja en la limpieza y la fumigación de los 23 cementerios municipales. Asimismo, se tiene programada una limpieza general para el 30 y 31 de octubre, tarea que se ejecutará de forma paralela a las labores que realicen los dolientes.

El Deber

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