De acuerdo con datos del INE y del Ministerio de Economía, el sector de la construcción muestra un crecimiento a mayo, con una variación positiva del 32%.
El mercado inmobiliario en Bolivia se recupera lenta, pero constantemente luego de la caída sufrida a causa de la pandemia de la covid, que generó una reducción en la demanda de propiedades en venta, así como afectaciones en los precios de hasta el 5% en algunos casos.
“El año pasado fue bastante difícil por la cuarentena y luego por la reducción de los ingresos. Muchos propietarios tuvieron que bajar los precios de sus departamentos y casas hasta en un 5% para poder venderlas, mientras que otros prefirieron salir del mercado esperando a que las condiciones mejoraran”, señaló Carmen Salazar, una corredora inmobiliaria independiente.
Por su parte, el gerente general de Ultracasas, Julio Cronembold, dijo que la pandemia afectó la demanda de propiedades en un 30% aproximadamente.
“El año pasado, con base en nuestros datos, hubo una caída de aproximadamente 30% de la demanda de propiedades; sin embargo, este año se está recuperando lentamente pero de forma constante”, dijo Cronembold.
Salazar indicó que en 2019 tenía un promedio de cuatro a cinco clientes por mes, mientras que a mediados de 2020 la demanda de sus servicios se limitó a uno o dos.
“La gente, al ver que la demanda se reducía prefería sacar sus propiedades del mercado para no verse obligada a bajar el precio de venta, otros no tuvieron más remedio que hacerlo”, agregó.
Otro de los problemas que vivió el sector el año pasado fue el de la falta de nuevas propiedades, lo que redujo también el mercado.
“En febrero de 2020 tenía para ofrecer departamentos en dos obras que estaban a medio camino de estar concluidas, con una fecha de entrega para el cuarto trimestre del año, pero la paralización de las actividades hizo que estas obras se atrasen y varios interesados se desanimaron”, comentó.
Respecto a los precios, Cronembold agregó que según los datos con los que se cuenta, los precios de las propiedades se vieron reducidos en un promedio de 5%, así como los alquileres.
“En general la pandemia ha contraído el sector inmobiliario, ha obligado a las empresas del sector a ser más eficientes, digitalizarse e incorporar tecnología para sobrevivir y ser rentables. Según nuestros datos, tanto en viviendas en venta como en alquileres se ha visto una caída de precios de aproximadamente 5% tomando como parámetro los precios del 2019”, expresó.
Alquileres
“En 2019 había departamentos que se podían alquilar en 600 dólares mensuales, pero en medio de la pandemia pasaron a ofrecerse por 450 dólares, y aún así no se los podía colocar”, señaló Marianela Chávez, una agente de bienes raíces. Durante la pandemia, la demanda de propiedades en alquiler se mantuvo constante; sin embargo, los precios de éstas se redujeron bastante.
“Por la pandemia, muchas personas tuvieron que buscar lugares más económicos para vivir, y eso con el tiempo hizo que los propietarios opten por reducir los alquileres, para poder rentar sus espacios”, apuntó la agente.
Otro de los factores que influyeron en la rebaja de los alquileres, señaló Chávez, fue el temor de que el Gobierno promulgue la Ley Excepcional de Arrendamientos, la cual señalaba que, durante la cuarentena, los propietarios debían reducir en un 50% los cánones de alquiler a sus inquilinos.
“La norma hizo que por un par de meses los precios de los alquileres suban, pero cuando el temor pasó, éstos volvieron con valores menores a los que tenían antes”.
A pesar de eso, Chávez y Salazar indican que actualmente la oferta y los precios de los alquileres se han estabilizado e incluso han mostrado un incremento.
“En Sopocachi, Miraflores y la zona Sur los precios de los alquileres se han apreciado ligeramente desde enero. Ya están alcanzado los valores que tenían en 2019, y la demanda se ha mantenido estable”, explica Salazar.
Recuperación de la construcción
De acuerdo con la Cámara Departamental de la Construcción de Santa Cruz (Cadecocruz), el sector muestra una reactivación paulatina después de la depresión del año 2020.
“Estamos recuperando nuestra actividad y fortaleza, pero todavía no hemos alcanzado los niveles precrisis”, señaló la entidad.
Cadecocruz indicó que después de la recesión y depresión que se produjo el año 2020 como consecuencia de la pandemia, actualmente se evidencia que la actividad de la construcción se está reactivando progresivamente, que se están reiniciando proyectos y obras que quedaron paralizadas.
“Esta recuperación ha sido lenta por la ralentización de la economía en general y los problemas de ingresos en las diferentes administraciones del Estado que afectan su liquidez; por tanto, sus posibilidades de financiar un programa ambicioso de inversión pública”.
A la fecha no se conoce información pública oficial actualizada del PIB. Los últimos datos publicados por el INE sobre el PIB corresponden al II trimestre 2020 (30 de junio de 2020). En el caso del Índice Global de la Actividad Económica (IGAE) los datos difundidos son de octubre de 2020.
“Según estos datos , la construcción habría crecido 32% a mayo de 2021. Es una cifra importante y muestra la recuperación de nuestra actividad económica después de los resultados negativos de la gestión 2020. Sin embargo, 2020 fue un año totalmente atípico, y si comparamos con la caída del 50,95% del PIB de la construcción de junio de 2020, es evidente que todavía no hemos alcanzado los niveles de crecimiento previos a la pandemia”, explicó Cadecocruz.
Aumentan ventas de cemento y permisos de construcción
De acuerdo con información del Ministerio de Economía y el Instituto Nacional de Estadística al mes de abril de 2021, los gobiernos municipales habían aprobado permisos de construcción por 742.211 metros cuadrados, cantidad que supera en 43,43% a la que se aprobó el año 2020, que fue de 517.473 metros cuadrados.
Al respecto, la Cámara Departamental de la Construcción de Santa Cruz (Cadecocruz) indicó que esta cifra todavía es inferior a los permisos de construcción aprobados en la gestión 2019.
Por otra parte, hasta abril de 2021 a nivel nacional el consumo de cemento fue de 1.035.528 toneladas, cifra superior en 29,7% en relación con el mismo período del año 2020, cuando llegó a 798.406 toneladas.
Cadecocruz indicó que si bien las cifras presentadas son alentadoras, la reactivación completa del sector de la construcción dependerá de la evolución y el volumen de la inversión pública ejecutada por las diferentes administraciones públicas del Estado,
“Si se alcanza la inversión pública presupuestada por el Gobierno para la gestión 2021 de 4.011 millones de dólares, y en el futuro se mantienen niveles anuales por encima de los 4.000 millones de dólares de inversión pública, se logrará la reactivación de la construcción y su crecimiento sostenible”.
De la misma manera, la entidad explicó que es fundamental que las entidades públicas del Gobierno central y de las regiones cancelen las deudas millonarias que tienen acumuladas con las empresas constructoras del país por concepto de planillas de avance de obra.
Fuente: Pagina Siete