El documento final de Barranquilla llama la atención sobre las acciones populistas que ponen en peligro las instituciones democráticas en varios países del continente, entre los que está Bolivia.
El XXVII Congreso Bienal de la Asociación Mundial de Juristas (WJA, sigla en inglés) denunció ayer en su declaración final las “falsas democracias” en varios países de América Latina y situó a Bolivia en el grupo de los países que ponen en riesgo la democracia.
La Declaración de Barranquilla llama la atención sobre las acciones populistas que ponen en peligro las instituciones democráticas en otros países del continente. “Ese mismo riesgo se corre en Bolivia, Perú, El Salvador y en otros países como México, donde se está poniendo en peligro la democracia constitucional”, señala el documento.
“En la declaración final se condenaron las dictaduras y autoritarismos en la región y la instrumentalización política de la justicia en Bolivia”, tuiteó la excanciller de Bolivia Karen Longaric, quien también participó en el evento junto a otras personalidades del mundo.
La declaración abarca los diversos asuntos tratados por juristas de todo el mundo en su cita de estos dos días en Barranquilla, la principal ciudad del caribe colombiano, y subraya su defensa del Estado de derecho así como la ausencia de éste en varios países latinoamericanos.
“Queremos denunciar la situación de Cuba, donde el estado constitucional y democrático del derecho lleva muchos años sin existir, así como mostrar nuestra especial atención en otros países como Venezuela y Nicaragua”, señala la declaración, leída por Manuel Aragón Reyes, magistrado emérito del Tribunal Constitucional de España. El texto se refirió a “la situación de deterioro de la democracia constitucional en algunos países que se está manifestando bajo formas de autoritarismos encubiertos con falsas democracias que quebrantan los derechos humanos”.
La declaración también llama la atención sobre las acciones populistas que ponen en peligro las instituciones democráticas en otros países del continente.
“Ese mismo riesgo se corre en Perú, Bolivia, El Salvador y en otros países como México, donde se está poniendo en peligro la democracia constitucional”, señala el documento.
Los juristas hicieron énfasis en que “es la democracia la única forma política que ha probado históricamente su efectividad para lograr una ordenada convivencia y humana” y cuestionaron a los gobiernos que apelan a “la paz sin derecho”.
“Es una falsa paz porque está apoyada en la fuerza, elimina las libertades ciudadanas y conduce a una paz sin justicia”, reza la declaración en otro de sus apartes en el que hace referencia, además, a la necesidad de promover las condiciones materiales para brindar un bienestar al que todos tengan acceso.
La declaración de Barranquilla, en sus últimos puntos, menciona: “Debemos advertir que la legitimidad democrática del poder, el respeto al Estado de derecho y la acción pública favorecedora del progreso social y económico requieren además de otras condiciones político-sociales para preservar y consolidar la propia democracia, en cuanto que ésta necesita también de la existencia de una cultura cívica que sólo la educación ciudadana, los medios de comunicación libres y responsables y la ejemplaridad de los dirigentes políticos y sociales pueden proporcionar”.
Otros temas
El cambio climático y el compromiso de los gobiernos para frenar las emisiones de carbono que producen el calentamiento del planeta también fueron abordados en la declaración de los juristas en Colombia.
“Entre los 17 objetivos de desarrollo sostenible (de la ONU), resaltamos los esfuerzos frente al cambio climático, uno de los problemas que más afecta a la humanidad porque pone en peligro la subsistencia de la vida”, señala el texto.
Igualmente, subraya que, ante esa amenaza, “el tiempo para reaccionar se está acabando” y que el derecho es uno de los instrumentos esenciales para revertir los efectos.
“Los Estados deben tener una legislación estable para que disminuya el uso de los combustibles fósiles y se apoyen y promocionen las energías limpias”, dice la declaración.
Fuente: EFE / Barranquilla, Colombia