Rusia no aceptará más pagos en dólares ni en euros por el gas que vende a Europa, por lo que será necesario pagar en rublos. Así lo ha expresado este miércoles el presidente ruso, Vladímir Putin, que ha reaccionado de esta forma a las numerosas sanciones impuestas a su país desde Occidente.
“He tomado la decisión de tomar medidas para que los países hostiles pasen a pagarnos el gas en rublos“, ha subrayado Putin. En concreto, el líder ruso ha especificado que esto es una respuesta a la congelación de los activos rusos en Occidente.
Al término de una reunión con su gabinete, el presidente ruso ha indicado que el país continuará suministrando gas de acuerdo con los volúmenes y los precios establecidos en los contratos. Así, el jefe del Kremlin ha indicado que ha dado instrucciones al Banco Central de Rusia y a su Gobierno para determinar dentro de una semana el orden de las operaciones para la adquisición de rublos en el mercado de la Federación Rusa por parte de aquellos compradores de gas ruso.
El gas ruso supone el 40 % del consumo de la UE y en algunos países como Alemania llega al 80%. Reducir las importaciones de gas ruso es especialmente apremiante para los países del centro y sureste de Europa, pues se encuentran entre los más dependientes de Moscú para abastecer sus necesidades energéticas y, por eso, entre los más expuestos a un eventual corte de suministros.
“Le he pedido que dé la instrucción apropiada a Gazprom sobre la modificación de los contratos existentes”, ha dicho el presidente ruso, señalando que todos los consumidores extranjeros deberán tener la oportunidad de realizar las transacciones necesarias para lo que deberá crearse un procedimiento de pago claro y transparente para ellos, incluida la compra de rublos rusos en el mercado de divisas nacional. “Valoramos nuestra reputación comercial como socio y proveedor confiable. Los cambios afectarán solo la moneda de pago, que se cambiará a rublos rusos”, ha subrayado.
Los países y territorios “hostiles”
El Gobierno ruso adoptó el pasado día 8 una lista de países y territorios hostiles, que incluye a EEUU y Canadá, todos los países miembros de la UE, el Reino Unido, Ucrania, Montenegro, Suiza, Albania, Andorra, Islandia, Liechtenstein, Mónaco, Noruega, San Marino, Macedonia del Norte, Japón, Corea del Sur, Australia, Micronesia, Nueva Zelanda, Singapur y Taiwan.
En opinión de Putin, Occidente, por la decisión de congelar los activos rusos -la reserva en divisas del Banco Central por ejemplo-, en realidad declaró una suspensión de pagos ante Moscú y pone fin a la fiabilidad de sus divisas. “Durante las últimas semanas, como saben, varios países occidentales han tomado decisiones ilegítimas sobre la congelación de activos rusos, y este Occidente colectivo en realidad ha trazado una línea bajo la confiabilidad de sus monedas (…)”, sostuvo.
El jefe de Estado afirmó que tanto “Estados Unidos como la Unión Europea han declarado, en principio, un incumplimiento real de sus obligaciones con Rusia”. “Y ahora todos en el mundo saben que las obligaciones en dólares y euros pueden no cumplirse”, resumió.
El anuncio ha tenido un efecto inmediato en la moneda rusa, que se fortaleció frente al euro y el dólar tras haberse desplomado desde el 24 de febrero, cuando las fuerzas rusas entraron en Ucrania.
Fuente: El Periódico de Catalunya