Santa Cruz confirmó el cuarto caso de la viruela del mono, pero el primero de transmisión local, puesto que el paciente asegura no haber viajado recientemente al extranjero ni haber tenido contacto con ninguno de los tres positivos anteriormente. Entre tanto, las autoridades de salud trabajan en la habilitación de salas de aislamiento en distintos centros hospitalarios.
El último positivo se reportó ayer en una persona de 27 años de edad que guarda aislamiento domiciliario. El joven acudió a un centro de salud tras presentar algunos síntomas de la enfermedad, por lo que se le practicó la prueba respectiva a la que dio positivo al virus.
“Se trata del primer caso de transmisión local, porque no tiene antecedentes de haber viajado al extranjero ni de haber estado en contacto con alguna persona del extranjero o ya contagiada. Estamos hablando de un brote, en una etapa de transmisión local”, indicó Fernando Pacheco, secretario Departamental de Salud.
En el país, el primer caso fue reportado el lunes 1 de agosto y su cuadro clínico es estable. También guarda aislamiento domiciliario con tratamiento médico. Sus lesiones en la piel están en la etapa final.
Las autoridades sanitarias hicieron conocer que esta persona, de sexo masculino, tuvo contacto con un extranjero. Este último había regresado a su lugar de origen por lo que el paciente cero ya no estaría en Bolivia.
El segundo caso, según el ministro de Salud, Jeyson Auza, es una persona de sexo masculino de 26 años, nacionalidad brasileña, con antecedente de VIH positivo, que viajó a Campo Grande- Brasil, donde habría contraído la enfermedad y hay cinco personas de su entorno que serán investigadas y aisladas para prevenir la propagación de la enfermedad.
El tercer paciente es varón de 43 años, sin antecedentes patológicos, pero también se habría contagiado en la ciudad brasileña de Campo Grande.
“Sin embargo, refiere que tiene tres contactos de personas con las que vive, que también fueron aisladas para su respectivo control epidemiológico”, destacó el ministro Auza.
“El Gobierno nacional tomará todos los recaudos correspondientes para preservar la vida de esas personas y junto a las brigadas médicas se realizarán las investigaciones para detectar la procedencia de esos casos al igual que el control de los sospechosos del entorno familiar”, aseveró el titular del Ministerio de Salud.
Según indicaron las autoridades, el primer caso no tiene relación alguna con el segundo y menos con el tercero, pero estos dos últimos tienen el nexo de que visitaron la misma ciudad brasileña. Sin embargo, el cuarto paciente es considerado el primer brote de transmisión local, lo que lanza la alerta a los galenos.
El ministro de Salud develó que las pruebas genómicas a los pacientes fueron realizadas por el Centro Nacional de Enfermedades Tropicales (Cenetrop) y pudieron ser detectados en cuestión horas.
Tratamiento
Por su parte, el director del Sedes en Santa Cruz, Erwin Viruez, indicó que no existe un tratamiento específico para la viruela símica. “Es un enfermedad viral y como tal no cuenta con un tratamiento específico sino sintomático. Hay que considerar otro aspecto, que son pacientes que tienen patologías de base, alguna inmunodepresión que pueden desatar algún tipo de complicaciones respiratorias, neumonías o sobreinfecciones de las lesiones en la piel”, detalló el médico.
Según explicó Viruez, la condición clínica de los tres pacientes en Santa Cruz es estable.
Asimismo, aclaró que la única forma de contagio de la viruela del mono es a través del contacto directo. “Estas lesiones se presentan en la cara, en la boca, en el cuello, en las manos, en los pies, además se han encontrado partículas del virus en la saliva, en los fluidos vaginales, en el líquido seminal pero que no se ha podido evidenciar que haya contagio”, apuntó Viruez.
Salas de aislamiento
Pacheco informó que Santa Cruz tiene la capacidad de habilitar varios centros de salud, incluyendo algunos del tercer nivel, para la atención de pacientes con la viruela del mono. Por ahora, analizan el cuadro clínico de las personas contagiadas para determinar si continúan su aislamiento domiciliario o necesitan ser trasladados hacia algún centro hospitalario.
“Estamos viendo las condiciones de todos los centros para habilitar las respectivas salas de aislamiento. Entre las condiciones se valora que debe ser de 24 horas, con el personal médico y de enfermería, además con farmacias y laboratorios a disposición”, indicó Pacheco a tiempo de referirse al centro de salud Elvira Wünderlich, como uno de los que cumple con todos los requisitos.
Este centro aisló al primer paciente sospechoso de viruela símica en el mes de mayo.
Asimismo, el secretario de Salud de la Gobernación, reveló que en caso de que el número de pacientes aumente, están viendo la posibilidad de tener un ala o una sala específica en el hospital San Juan de Dios.
Sin embargo, Pacheco pidió a la población no alarmarse indicando que el índice de letalidad de la viruela del mono es menor al 1 %.
Bioseguridad
Si hay un aspecto en el que coinciden las autoridades de salud, es en las medidas de bioseguridad como clave para contener los contagios.
“Una de las actividades más efectivas para prevenir la viruela símica es a través del cumplimiento de las medidas de bioseguridad. El lavado correcto de las manos, la desinfección permanente con alcohol en gel, además de evitar el contacto directo con los pacientes y reforzar las defensas mediante una buena alimentación es muy importante”, resaltó Pacheco.
Síntomas
De acuerdo a los últimos estudios de los especialistas, el contagio entre humanos es a través de heridas de la piel, las vías respiratorias, los ojos, la nariz y la boca.
En cuanto a los síntomas, estos van más allá de la erupción cutánea tan característica de la enfermedad, puesto que pueden incluir dolores musculares, fiebre, escalofríos, agotamiento, dolor de cabeza, dolor de espalda o ganglios linfáticos inflamados.
En algunos casos, incluso, se ha confundido la enfermedad con otras patologías, por eso piden que ante cualquier síntoma se debe acudir a la consulta médica.
Fuente: El Deber
