Invierten Bs 20,8 millones en nueva planta de trituración de hierro que aumentará 10 veces la producción de este mineral. Cámara Minera del Oriente y la Gobernación cruceña piden política siderúrgica coherente.
La Empresa Siderúrgica Mutún (ESM) proyecta duplicar las exportaciones e ingresos de divisas por exportaciones de mineral de hierro y África es el nuevo mercado de destino de las ventas externas. En 2022, usando la terminal de Puerto Busch, Bolivia despachó 152.007 toneladas a los países de Europa (Rumania, Reino Unido y Polonia).
A decir del presidente de la ESM, Jorge Alvarado, este año se tiene planificado exportar unas 255.000 toneladas de mineral de hierro, lo que permitirá duplicar los ingresos para reactivar la economía.
Para esto, indicó que de la ESM adquirió con recursos propios una nueva planta fija de clasificación y trituración de mineral de hierro que permitirá incrementar 10 veces la producción de mineral. La planta, cuyo montaje registra un 70% de avance, tiene una capacidad de producción de alrededor de 350 toneladas por hora, lo que significa al mes de 80.000 a 100.000 toneladas y de 850.000 a 1 millón de toneladas por año.
En el ámbito de mercados externos de destino de la producción de mineral de hierro que se explota en el yacimiento Mutún, Alvarado indicó que a partir de este año países de África se suman a la cartera de clientes de la ESM. En 2022, lo hicieron países europeos, tales como Rumania, Reino Unido y Polonia.
En relación con la construcción de la industria del hierro en Puerto Suárez, en Santa Cruz, Alvarado indicó que registra un 70% de avance físico, estimando la conclusión de las obras hasta el cierre de la presente gestión. Aclaró que desde 2024 se prevé producir unas 200.000 toneladas de acero enteramente para el mercado interno, con lo que se aspira sustituir un 50% de las importaciones. Actualmente, Bolivia importa por año unas 450.000 toneladas de acero de Perú, Argentina y Brasil.
A decir de Alvarado, la siderúrgica de Mutún producirá barras corrugadas de acero y alambrón de diferentes diámetros para subproductos como clavos, alambre, tuercas, tornos, entre otros, que requerirá la instalación de otras pequeñas fábricas.
El complejo, que abarca 42 hectáreas, contará con siete plantas: Concentración, Peletización, Reducción Directa (DRI), Aceración, Laminación, Central Eléctrica y Auxiliares. Estiman en $us 546 millones la inversión.
En el marco de la política de industrialización de los recursos naturales para sustituir las importaciones, el ministro de Planificación del Desarrollo, Sergio Cusicanqui, afirmó que dos pilares sientan las bases de esta estrategia económica del Estado: la industrialización en regiones con potencial producción; y la industrialización de los diferentes recursos naturales, como el litio y el hierro del Mutún.
Política siderúrgica coherente
El presidente de la Cámara Minera del Oriente (CMO), Mario Félery, indicó que las 200.000 toneladas de acero que se estima producirá la Planta Siderúrgica del Mutún, incluyendo el ‘alambrón’, solo representan la sustitución del 30,5% del total global de las importaciones de acero en Bolivia.
Además, Félery observa que, para sustituir las importaciones de barras de acero destinadas a la construcción civil en Bolivia, la producción de la Planta Siderúrgica del Mutún deberá cumplir con estándares internacionales de calidad y principalmente lo que dispone la norma boliviana del acero. Del mismo modo, insinuó que deberá lograr una producción a bajo costo, que le brinde ventajas competitivas en cuanto a los precios vigentes en el mercado.
En contraste con la inversión millonaria y los alcances del proyecto siderúrgico estatal, Félery relievó que en Santa Cruz se materializó la instalación del proyecto de capital privado (Siderúrgica Las Lomas), con una inversión de $us 177 millones en equipos de última generación, alcanzando una producción de 200.000 toneladas de acero corrugado para la industria de la construcción en Bolivia (54% de la demanda aproximadamente), esto a partir de chatarra.
Félery opinó que se debe de generar una política siderúrgica coherente que contemple la producción de arrabio y pellets, generando así verdaderamente un gran aporte de ingresos para la economía nacional. “Esto solo podrá suceder, siempre y cuando, se atraigan grandes capitales extranjeros y su desarrollo integral sea ejecutado por una asociación público-privada, otorgándole las condiciones de infraestructura y logística necesarias (vías de acceso e infraestructura portuaria en Puerto Busch)”, puntualizó.
Desde la Gobernación de Santa Cruz, el director de Hidrocarburos, Minas y Energías, Eduardo Ibáñez, cuestionó la poca transparencia en la información, citando que se habla de un 70% de avance en la construcción del proyecto siderúrgico estatal, pero hasta ahora el contratista no presentó el diseño final del complejo.
Ibáñez dijo que esperan que las iniciativas en curso para aumentar la producción y exportación de hierro se traduzcan en un aumento de los montos percibidos por regalías para la región. En lo macro, considera que se debe planificar a mediano y largo plazo el desarrollo de las reservas -estima que 40.000 millones de toneladas de hierro y 10.000 millones de toneladas de manganeso- no solo mirando la exportación de materia prima, sino de productos terminados.
Fuente: El Deber