El ministro de Economía dijo que gracias a las reuniones que tuvieron con las calificadoras, los bonos del país experimentaron una leve recuperación estos días.
El Gobierno boliviano reconoció que la crisis económica que atraviesa el país se debe, en parte, a las disputas internas del MAS porque la Asamblea no aprueba préstamos de organismos internacionales que ya fueron aceptados por los mismos, pero resta el beneplácito del Órgano Legislativo.
“Un elemento que hay que considerar es que las fricciones políticas que se van generando en la misma Asamblea están imposibilitando hacer esta reconstrucción de la economía, por eso también nuestra preocupación desde el Ejecutivo, para que nuestros asambleístas entiendan que la reconstrucción económica es un patrimonio de todos, no es un logro necesariamente de un solo actor económico”, pidió el ministro de Economía, Marcelo Montenegro, en una conferencia de prensa.
Los dos primeros mandatarios salieron esta semana a reclamar a la Asamblea para que apruebe los contratos de préstamo que están en sus manos. El martes, el vicepresidente fue gráfico con los campesinos y les dijo que el país se había quedado sin plata y que por eso estaban recurriendo a préstamos.
El ministro de Economía hizo una extensa explicación de cómo recibieron el Gobierno de manos de Jeanine Áñez y cuál fue el camino que siguieron, y dijo que después de sortear las dificultades del 2020, empezaron trabajar en la pandemia y cuando ya se había salido en 2021 de esa crisis, vino la guerra Rusia-Ucrania que puso la economía en dificultades porque encarecieron los productos, los insumos de todo tipo, y principalmente los hidrocarburos que se elevaron hasta en un 80% del precio que estaba calculado originalmente.
“Consideramos que la economía boliviana está atravesando un momento importante de su reconstrucción y que, obviamente, esta reconstrucción requiere de recursos, una liquidez que puede provenir de ese endeudamiento.Ya está aprobado por los socios multilaterales”, afirmó.
Más adelante dijo que la caída de los bonos y los informes de calificadoras internacionales merecieron la explicación del Gobierno a esos expertos y producto de esos encuentros los bonos empezaron a recobrar en los indicadores.
“En las reuniones que he tenido en Washington con varios inversionistas, estas mismas calificadoras de riesgo nos han manifestado que un elemento que está preocupando a todos los inversionistas son estas fricciones políticas que se están dando en el país y que, obviamente, generan un ambiente de incertidumbre, pero hay que señalar que ante la explicación que hemos dado a los inversionistas, el precio del bono que estaba cayendo ha empezado a tener una recuperación”, aseguró, al responsabilizar nuevamente a la crisis política interna del MAS los problemas económicos.
De ese modo, el Gobierno dejó en claro que la división que experimentan en el plano político tiene consecuencias económicas, diferencias que parecen insalvables cada día que pasa, pues ya se llegó a denuncias penales y agresiones físicas incluso dentro del parlamento.
“Exhortamos a nuestros asambleístas a que depongan actitudes de fricción innecesarias y que nos aboquemos a una gestión económica para hacer frente a las altas tasas de interés, el aumento del precio de los insumos que ha llevado a una inflación mundial y que es uno de los problemas más grandes que tienen todas las economías del mundo. Aquí en Bolivia hemos dado pasos para generar la estabilidad”, resaltó Montenegro.
Fuente: El Deber