Arce enfrenta dificultades en el legislativo desde que el partido oficialista se fraccionó.
En un acto público realizado en Chuquisaca, el presidente Luis Arce promulgó este jueves la ley que declara como prioridad nacional la incorporación de los tramos Sucre-Poroma (Chuquisaca), Puente Chayanta-Toro Toro (Potosí) y Río Caine-Anzaldo (Cochabamba) a la Red Vial Fundamental.
El mandatario dijo que “ha sido ardua” la tarea llevada adelante para lograr que esta ley sea aprobada en la Asamblea Legislativa y en ese sentido volvió a expresar su incomodidad por la falta de apoyo de parte de algunos legisladores, incluso del propio partido en función de gobierno, es decir, el Movimiento Al Socialismo (MAS).
“Nuestros diputados y senadores (que están aquí) saben perfectamente cuánto han tenido que batallar en nuestra Asamblea Legislativa para aprobar esta ley importantísima; (…) ha sido difícil, ha sido complicado, porque inclusive dentro de nuestra bancada del Movimiento Al Socialismo no todos apoyan, no todos nos aprueban nuestras leyes”, lamentó.
Sin embargo, también remarcó que hay “hermanos chuquisaqueños” y otros legisladores nacionales “conscientes” que sí aprueban leyes.
Es decir, “asambleístas nacionales conscientes de que, cuando nosotros venimos a hacer obras, no es para el Presidente, no es para el Vicepresidente, (sino que) estas obras benefician al pueblo. Por eso exhortamos una vez más a esos hermanos que no están entiendo que las acciones, que las políticas del gobierno, apuntan a beneficiar a la población, a toda esa gente por la cual hoy nosotros somos diputados, senadores, vicepresidentes y presidentes”, puntualizó.
No es la primera vez que Arce se queja por el bloqueo de leyes en la Asamblea Legislativa, incluso, hace dos días consideró que se debe “hacer cuerpo” entre todos para que dichos proyectos sean aprobados.
Arce enfrenta este tipo de dificultades en el legislativo desde que el partido oficialista se fraccionó entre quienes lo apoyan y quienes respaldan al bloqueo del expresidente Evo Morales.
Fuente: El Deber
