Luego de admitir que el coronavirus es un problema serio, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, volvió a minimizar la gran crisis sanitaria que vive el mundo por esta pandemia al comparar este viernes al virus con la lluvia pasajera que no debe ser magnificada.
“El virus es igual a una lluvia, ella viene y uno se moja, pero uno no va a morir ahogado”, declaró el mandatario y agregó que “Hay personas más débiles (…) esas personas son las que sufren más”, afirmando su postura en favor de una cuarentena sólo para ancianos y personas con enfermedades que son más vulnerables al coronavirus.
El martes pasado, Bolsonaro se habría retractado de sus dichos y pedía a su población quedarse en sus casas. Además, admitía en cadena de radio y televisión que el coronavirus es una “realidad” y convocaba a la “unión nacional” para combatir el virus.
