El mercado cambiario de Argentina se vio sacudido este martes cuando el dólar informal superó la barrera sicológica de los 1.000 pesos por billete verde, una abrupta depreciación de la moneda local que reavivó los temores de una hiperinflación, a días de las presidenciales del 22 de octubre.
Conocido como ‘dólar blue’, el tipo de cambio paralelo había cerrado el lunes en 945 pesos, mientras que la cotización oficial se ubicó en 365 pesos.
La volatilidad en el mercado cambiario coincide con la recomendación del candidato ultraliberal Javier Milei, favorito en las encuestas, de no renovar plazos fijos en pesos argentinos.
“Jamás en pesos, jamás en pesos. El peso es la moneda que emite el político argentino, por ende no puede valer ni excremento, porque esas basuras no sirven ni para abono”, dijo.
En plena escalada cambiaria y ante temores de una corrida bancaria, la Asociación de Bancos emitió un comunicado en el que exhortó a los candidatos a actuar con responsabilidad.
“Los candidatos deben evitar hacer declaraciones infundadas que generen incertidumbre en la gente y volatilidad sobre las variables financieras”, aseveró.
En medio de estas turbulencias, desaparecieron los habituales cambistas callejeros que ofrecen el ‘dólar blue’ a los turistas en el centro de Buenos Aires.
“La clientela baja cuando el dólar sube. La gente siente el efecto. Son variaciones significativas. Los precios de algunas cosas aumentan 15% o 20%”, comentó a la AFP Vladimir Carballo, de 57 años, en una tienda de golosinas.
Controles y medidas
El gobierno, que lleva como candidato presidencial al ministro de Economía Sergio Massa, oficializó este martes una unificación de varios tipos de cambio vigentes para turismo y ahorro, a los que se aplican impuestos para desalentar la compra de divisas.
La semana pasada hubo decenas de operativos policiales en las llamadas ‘cuevas’ en las que se negocia el ‘dólar blue’, así como allanamientos a financieras, para tratar de detectar operaciones ilegales de fuga de divisas.
Desde 2019 rige en Argentina un control de cambios en el marco de un fuerte deterioro de las reservas internacionales, que el lunes cerraron en 26.268 millones de dólares según las autoridades. Pero según los analistas, las reservas realmente disponibles del Banco Central están en cero.
Con una inflación anualizada de 120% a agosto, la tasa de interés para los plazos fijos se encuentra en terreno negativo de rentabilidad, en 118% anual.
Argentina mantiene un acuerdo crediticio con el Fondo Monetario Internacional por 44.000 millones de dólares, en el cual se comprometió a una fuerte reducción del déficit fiscal.
Dolarizar sin dólares
Hace pocos días, Milei había estimado que el deterioro del peso favorece su proyecto de dolarizar la economía si llega a la Presidencia. “Cuanto más alto esté el precio del dólar, más fácil es dolarizar”, dijo.
El ministro Massa acusó a Milei de “irresponsable”.
“Cuando veo candidatos que por un voto son capaces de prender fuego una casa, la verdad es que me preocupo. Esa irresponsabilidad no me hace daño a mí, no le hace daño al gobierno, le hace daño a millones de argentinos”, sostuvo.
Patricia Bullrich, candidata presidencial de Juntos por el Cambio (centro-derecha), acusó a Massa, que en las semanas recientes ha decretado reducciones impositivas, y también a Milei.
“DOLAR A 1.000. Entre el pirómano de Massa que nos está llevando a la hiperinflación y la irresponsabilidad de Milei que fomenta la corrida cambiaria están los argentinos angustiados por el presente y el futuro”, dijo a través de la red X (antes Twitter).
De su lado, el economista y diputado liberal José Luis Espert, sostuvo que el deterioro de la moneda favorece los planes de Milei.
“Milei necesita, dado que él quiere dolarizar y no tiene dólares, de un dólar infinito, de una hiperinflación, entonces está haciendo todo lo posible para que ocurra porque él la necesita para cumplir su fantasía delirante de dolarizar sin dólares”, afirmó.
El 14 de agosto, luego de las primarias en las que Milei resultó el candidato más votado con el 29,8% de los sufragios, el gobierno devaluó en 20% la moneda, que quedó a 365 pesos por dólar, y el paralelo se elevó ese día a 685 pesos.
La primera vuelta de las elecciones presidenciales tendrá lugar el 22 de octubre.
Fuente: RFI