“Pedimos información complementaria al Ejecutivo, nos llegó, no esperamos 15 días, analizamos la respuesta de la Alcaldía a las observaciones y vimos que nos las subsanaron, por lo que el pleno rechazó ese apartado”, informó.
Explicó que uno de los componentes observados por los concejales es el de las frutas, porque la manzana y la pera serían importadas, detalle que vulnera la Ley 622, que exige que los productos del desayuno sean producidos en el país.
Agregó que el informe de la Alcaldía indica que en caso de no haber esas frutas, podrían ser reemplazadas por queques, galletas y otros ítems, pertenecientes a otros componentes, lo cual también vulneraría la mencionada ley.
Lo que se aprobó fue la ración líquida de la alimentación complementaria escolar, que demandará una inversión al municipio de más de 37 millones de bolivianos y que consta de leche chocolatada, yogurt frutado, néctar de frutas, licuados de leche con pulpa, leche saborizada, deslactosada y otros productos, explicó Jimenez.
“También se determinó aprobar el contrato de 17.830.000 bolivianos para la alimentación con raciones sólidas, estamos hablando de pastel de hojaldre, queques, empanadas, maní tostado, barras saborizadas, galletas obleas, maíz insuflado y otros”, complementó.
Sobre el tema de las frutas, el concejal dijo que el informe fue devuelto a la Alcaldía para que en el plazo de 60 días puedan subsanar las observaciones.