Alcaldía aprobó ley de cuarentena; la Gobernación y Gobierno coordinan acciones y critican al municipio
El coronavirus COVID-19 deja más de 190.000 casos de contagio en 162 países del mundo, la mayoría (poco más de 81.100) en China, donde se han registrado 3.241 muertes por esta causa. La cifra de decesos en todo el mundo roza los 8.000 y la de los recuperados, los 82.000. Fuera de China, Italia es el país con más casos y España, segundo de Europa y cuarto del mundo, supera los 11.800 casos.
Hablar con los responsables de empresas y patronales turísticas esta semana se ha convertido en algo parecido a lanzar un pequeño objeto sin mucha fuerza por una ventana. Al principio avanza horizontalmente, sí, pero enseguida la fuerza de la gravedad hace su trabajo y el objeto cae a plomo.
El impacto que tendrá la crisis del coronavirus en la economía china aún está por verse, pero las cifras que van publicándose dibujan un panorama sombrío.
El petróleo sigue inmerso en un mercado bajista que no logra abandonar. El barril de Brent corrigió un 4% y ha perdido los 29 dólares por barril, acercándose a los mínimos marcados en enero de 2016. Por su parte, el crudo West Texas, de referencia en EEUU, pierde un 6,5% y cede los 27 dólares por barril. Este descenso se produce tras el desplome del 11% que sufrió en la jornada del lunes.
El Gobierno emitió este martes el Decreto 4196, con el cual declara cuarentena nacional con la orden de que todos los habitantes permanezcan en sus domicilios a partir de las 17:00, bajo sanción de arresto de ocho horas. En medio de este escenario, la Gobernación de Santa Cruz y la Alcaldía pugnaban por hacer prevalecer sus medidas en la región oriental. Al final, la cuarentena de la comuna cruceña quedó en nada y la concejal Angélica Sosa quedó mal parada. Empero, lo que preocupa es que muchos sectores no obedecen y la situación es crítica.