Los trabajadores de las empresas constructoras que tomaron las instalaciones de la Asociación de Municipios de Santa Cruz (Amdecruz) suspendieron la medida extrema tras la promesa de pago, la próxima semana, de los proyectos financiados en el marco del Fondo Indígena.
Ayer, trabajadores de las 105 empresas afiliadas a la Asociación de Empresas Constructoras (Adeconts) habían tomado pacíficamente las oficinas de Amdecruz y se declararon en huelga de hambre, reclamando que las 55 entidades territoriales autónomas de Santa Cruz cumplan con el pago de planillas retrasadas que corresponden a más de 300 obras ejecutadas hace más de un año. La deuda alcanza los Bs 309 millones.
El presidente de Adeconts, Rudy Granado, informó que existe la promesa de desembolso de parte de los alcaldes, luego que el presidente de Amdecruz, Moisés Salces, quien hizo conocer que se encuentra gestionando recursos para debitar el pago de los proyectos que tocan al Fondo Indígena.
El dirigente aseguró que este sector, del cual dependen más de 10.000 familias, esperarán hasta la próxima semana para recibir los desembolsos, de otra manera, volverán a las medidas de presión, de manera indefinida
Por su parte, el presidente de Amdecruz, Moises Salces informó que existe el compromiso del Gobierno y la Ministra de Desarrollo Rural y Tierras, Eliane Capoboianco, de comenzar a desembolsar recursos del Fondo Indígena, destinados a cubrir las deudas con los constructores. Sin embargo aclaró que gestiona los desembolsos únicamente de los proyectos del Fondo Indígena, no asi de los proyectos UPRE, que en tienen un panorama más complicado.
Afirmó que los proyectos que corresponden a la Unidad de Proyectos Especiales (UPRE), según referencia del actual Gobierno, fueron ejecutados sin presupuesto. “Para viabilizar los pagos esperan luz verde de los créditos internacionales que aguardan aprobación en la Asamblea Legislativa Plurinacional”, subrayó.