Si la gente piensa que hasta el 29 de mayo bajará la curva de la pandemia y al día siguiente decida bailar, está equivocada, dijo el coordinador del Sedes – La Paz, Luis Larrea a tiempo de alertar que La Paz podría tener hasta 5.000 casos de coronavirus entre junio y julio próximo, si la gente no toma en serio la cuarentena con el distanciamiento social, lavado de manos y el uso de barbijos.
“Entre junio y julio tendremos lo peor de la epidemia”, dijo entrevistado por Erbol al estimar que la capacidad de contagio podría subir de 1 a 40 personas, porque hasta ahora la gente no ha entendido la importancia de cumplir las medidas de bioseguridad.
Dijo que el transporte público se constituye en un peligroso medio de propagación masiva de donde la gente puede llevarse el contagio a casa debido a que el virus tiene una capacidad de vida de seis horas.
Larrea indicó que hasta ahora la cuarentena cumple el objetivo de aplacar la curva y permite que las autoridades de gobierno preparen la infraestructura hospitalaria con equipos necesarios y que en La Paz pase lo mismo de Santa Cruz que con 1.000 casos está colapsando.
“Aquí en La Paz, hay algo que nosotros hemos comenzado a ver (el 7 de mayo) y es el comportamiento que tiene la población. Ya están comenzando aparecer casos porque la gente no está tomando en cuenta (la cuarentena) igual que en Santa Cruz. Cualquier rato La Paz va a comenzar a subir como subió Beni”, manifestó.
Explicó que en este momento La Paz tiene cerca de 294 casos y necesita 14 camas de terapia intensiva que existen en el Hospital de La Portada de La Paz y en el Hospital del Norte en El Alto, pero si llegaría a 500 o 1.000 casos no tendrá capacidad de atender, motivo por el que ambas ciudades fueron catalogadas de alto riesgo.
Dijo que hay el Hospital del Sur y de Santiago II en El Alto pero no tienen camas, equipos ni personal, “es un edifico sin nada”. La Paz cuenta con capacidad de realizar 40 pruebas al día y para una ciudad de 2 millones de habitantes es totalmente insuficiente, indicó.
Manifestó que en coordinación con las Alcaldías de La Paz y El Alto se están comprando 500 mil pruebas que llegarán en diez días, con lo que el departamento estaría preparado para un testeo masivo.
Aclaró que esta situación no es culpa del gobierno sino antes no hubo una priorización del tema salud. Por eso actualmente trabajan para preparar hospitales, equipos y personal que permita llegar al riesgo moderado con menos pacientes graves y menos fallecidos.
El dirigente aseguró que la población tendrá que asumir conciencia de estar obligada a vivir con medidas de bioseguridad hasta septiembre u octubre, cuando se verá la masividad de los contagios y que los casos de coronavirus hasta fin de año puedan ser atendidos y sanados como una si fuera una gripe cualquiera y mejor si el próximo año ya exista alguna vacuna.
“La cuarentena sirvió para evitar la propagación. Si salíamos todos a la calle pudo ser una catástrofe en La Paz”, declaró Larrea, preocupado también por la actitud del Gobernador de La Paz Félix Patzi haciendo votos para que pronto retorne al comité de coordinación por el bien del departamento.