Al menos 159 reclusos contrajeron COVID-19 y 40 perdieron la vida a causa del virus, informó el viceministro de Seguridad Ciudadana, Wilson Santamaría.
La autoridad dijo que se toman todas las previsiones necesarias para tratar de frenar esta mortal pandemia que azota a Bolivia desde marzo pasado, y cuyos casos positivos ya sobrepasaron los 47.000 en todo el país.
“En resumen, tenemos 159 internos que han dado positivo, 118 sospechosos, 74 dados de alta, 17 internaciones (en centros hospitalarios) y un total de 40 fallecidos en todo el sistema penitenciario”, remarcó la autoridad, citado en un boletín de prensa.
Paralelamente, se dispuso que brigadas médicas de los servicios departamentales de Salud (SEDES) realicen visitas para identificar a privados de libertad que podrían estar con síntomas, o tener COVID-19.
Asimismo, Santamaría remarcó que se fumigan cada día los centros carcelarios ante posibles brotes de este mal, y se dispusieron espacios de aislamiento para sospechosos y casos positivos.
En Bolivia, existen 48 cárceles y carceletas, donde se tiene una población de más de 18.000 privados de libertad acusados de diferentes delitos, algunos con detención preventiva y otros con sentencias ejecutoriadas.
ABI.
