Consideran que es una corriente mundial, pero que antes se debe definir si se va a cobrar por el servicio de estas empresas o por las ganancias que obtienen. Alertan que emprendedores digitales del país pueden pasar a la informalidad.
Es Jaime Dunn, analista económico, el que señala que el Impuesto al Valor Agrados (IVA) es un gravamen al consumo, es decir quien lo paga es el consumidor final de bienes o servicios
Por lo que para Dunn el cobro impositivo no cae directamente en el ingreso de las empresas, si no que afecta al costo de un producto o servicio
“En resumen, el que va a pagar no es la empresa digital, sino el ciudadano boliviano de a pie. Porque se va a incrementar ese 13% de los productos o servicios que brindan esas empresas internacionales”, hizo notar Dunn.
El analista sostuvo que este tipo de cobros es una corriente mundial, pero los países han empezado a clasificar si el cobro es por el servicio o por la ganancia que está teniendo la empresa. Para Dunn, en el caso de Bolivia ya está claro que el Gobierno quiere cobrar por el servicio que dan estas empresas.
Mauricio Ríos, analista financiero, remarcó que de prosperar este proyecto lo único que va hacer es encarecer el servicio para el consumidor final. Pues las empresas van a trasladar ese incremento de impuestos a los precios finales.
Ríos observó que hay servicios en donde emprendedores digitales, sobre todo jóvenes, que desarrollan o que incluso crean nuevas plataformas que se alojan ya en el ecosistema de empresas como Amazon, que quebrarán o no les quedará más que refugiarse en la informalidad.
“Si incrementan impuestos en Bolivia a las firmas digitales, dejarán fuera del mercado a muchos emprendedores digitales que hoy ofrecen soluciones a problemas de gente que ni siquiera conoce a cambio de un legítimo beneficio. Quedarán fuera al encarecer sus costos de inversión”, observó Ríos.
Para el analista más impuestos es más informalidad, mayor precariedad laboral, mayor desempleo, mayor pobreza.
Más cauto, el analista tributario, Pablo Ordoñez, indicó que antes se debe conocer bien el proyecto de ley, pero por lo adelantado por Arce lo que se busca hacer es una modificación del IVA y de la Ley 843, para incluir nuevos servicios digitales prestados desde el exterior.
Mientras que para, Alfredo Troche, experto tributario, la medida le parece acertada, porque es una manera de ampliar la base tributaria, aspecto muy importante y necesario para el país.
Troche remarcó que las empresas que operan virtualmente en diferentes países, generalmente pagan los impuestos de acuerdo a las normas del país de destino.
Para Troche esto no implica necesariamente que tengan que subir los precios al consumidor final, simplemente estas empresas reducen su margen de ganancias.
Desde la operadora de telecomunicaciones Tigo, indicaron que cumplen con la normativa nacional vigente y siempre están atentos a los anuncios del Gobierno, y que, en este caso puntual, aun no tienen acceso a la normativa, motivo por el cual no pueden emitir una opinión.
Por Juan Carlos Salinas Cortez
Fuente: El Deber