Aunque el Gobierno nacional aseguró que la Ley de Modificaciones al PGE 2022 no contempla el incremento del Impuesto al Consumo Específico (ICE) de bebidas alcohólicas y no alcohólicas, el sector empresarial se mantiene en alerta ante la ambigüedad y discrecionalidad de la norma, pues no descarta que ésta triplique el impuesto a productos como la cerveza, el vino y el whisky, lo que fomentaría el contrabando.
Un análisis elaborado por la Cámara de Industria y Comercio de Santa Cruz (Cainco) señala que actualmente el ICE a la cerveza está conformado por dos alícuotas: la específica y la porcentual. Actualmente, la primera es de 3,96 bolivianos por litro de cerveza, mientras que la segunda es del 1 por ciento del valor por litro.
Con la nueva normativa, la alícuota específica al litro de cerveza tendrá un rango de 2,60 a 10 bolivianos y la alícuota porcentual será del 1 al 15 por ciento. La modificación tiene un similar impacto en las alícuotas al vino, whisky y bebidas energizantes, mientras que el incremento es mayor para el ron, vodka y aguardientes.
Según Ian Miranda, jefe de investigación sectorial de Cainco, la aplicación de mencionada norma representa un posible incremento de hasta un 300 por ciento en el ICE a las bebidas alcohólicas y no alcohólicas, situación que representa un desmedro severo a las industrias nacionales y empresas que importan bebidas formalmente.
Miranda explicó que la ley aplica tanto a las bebidas de producción nacional como a las importadas formalmente. Por ello, dijo que con el alza del impuesto los pequeños importadores formales optaron por migrar a la informalidad y la internación de productos de contrabando.
“Esto va a afectar a las empresas formales de la industria nacional, a los importadores y al consumidor también posiblemente porque se incrementan los precios; es algo crítico y lo que estamos viendo es que el contrabando se va a disparar aún más”, alertó Miranda.
El investigador aseguró que buscan ser tomados en cuenta por el Gobierno para debatir el reglamento que se aplicará a la ley en cuestión.
Por su parte, el expresidente de la Cámara Nacional de Industrias (CNI), Ibo Blazicevic, afirmó que esta ley incrementará el contrabando de bebidas en Bolivia, mismo que en la actualidad ya equivale al 20 por ciento de la oferta existente en el mercado nacional.
“Si subimos más el impuesto, la consecuencia lógica va a ser tener un contrabando mucho mayor, un desplazamiento de los productos nacionales por productos importados legal e ilegalmente”, dijo.
Contradicción
Miranda cuestionó el hecho de que el Gobierno destaque las recaudaciones impositivas, pero, al mismo tiempo, solicita un préstamo de 3 mil millones de bolivianos del Banco Central de Bolivia (BCB). En su criterio, eso demuestra que existe falta de liquidez y que el incremento de las alícuotas tiene el propósito de incrementar la recaudación.
Fuente: Los Tiempos