Marco Pumari, candidato a vicepresidente de CREEMOS fue el único en presentarse al debate de vicepresidente, organizado por Red Uno el domingo 1 de marzo. Incluso Samuel Doria Medina, candidato por Juntos y acompañante de fórmula de la candidata y presidenta transitoria Jeanine Añez, que había confirmado en un video que iba a participar decidió no asistir.
“Pareciera que el gobierno ha hecho un curso intensivo de “MASismo”, enfatizó Pumari en el programa televisivo. “En sólo cuatro meses de gobierno ya han comenzado a replicar las peores prácticas del MAS, como utilizar el aparato del Estado para hacer su campaña electoral y callar el debate público al no participar de estos eventos”, cuestionó el candidato de CREEMOS.
La ausencia de los otros candidatos en el primer debate televisivo es una muestra de que los aspirantes a gobernar el país están más interesados en que todo siga igual, que en escuchar la voz de la gente, enfatizó Pumari. “Una vez más, elijen seguir gobernando y haciendo campaña de espaldas a la gente”, apuntó.
Los candidatos de CREEMOS demuestran que cuando hablan de gobernar de forma transparente y de frente a la gente, cumplen con su palabra. “Aunque intenten callarnos, estamos convencidos que la voz de los bolivianos, esa voz poderosa que se elevó durante los 21 días, debe seguir escuchándose”, precisó Pumari.
En relación a los jóvenes, CREEMOS propone el voto a los 16 años. Esa es una medida que debe ser debatida y no puede ser considerada demagógica porque las leyes vigentes los consideran sujetos de derecho para ser penalmente responsables; además son ellos quienes en el campo y en las ciudades aportan al desarrollo económico de sus familias y el año pasado también salieron a las calles demostrando su compromiso cívico; por tanto tienen edad para decidir quién los gobierna.
Por su parte, el candidato a presidente Luis Fernando Camacho espera que los candidatos a presidente no usen las mismas excusas para no presentarse a debatir “porque es una exigencia de todos los ciudadanos que queremos un cambio real para Bolivia”.