La Autoridad de Supervisión del Sistema Financiera pidió a las entidades reprogramar los préstamos por el paro del censo en Santa Cruz y problemas climáticos.
Los créditos reprogramados del público, hasta el mes de octubre, llegaron a $us 5.070 millones. Este dato corresponde al último reporte de la Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban). El monto representa un 19% del total de la cartera de préstamos del sistema financiero.
Recientemente la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero emitió una circular en donde sugirió a los Empresas de Intermediación Financiera (EIF) analizar una nueva reprogramación de cartera a favor de los prestatarios. Esto debido al paro de 36 días que se acató en Santa Cruz y los desastres climatológicos que afectaron a varias zonas productivas del resto del país.
En días pasado, la Federación Departamental de la Micro y Pequeña Empresa (Fedemype) pidió un diferimiento en sus créditos de tres meses debido a que el paro cívico en Santa Cruz afectó mucho a ese sector. Por la medida de presión, un 70% de las unidades productivas no pudieron trabajar.
Boris Eduardo Mendoza, presidente de Fedemype en Santa Cruz, explicó que muchas unidades productivas tuvieron que usar su capital para poder subsistir.
Reprogramación
En este contexto, Asoban informó que sus asociados están atendiendo las solicitudes de reprogramación y refinanciamiento que sus clientes realizan para poder sobrellevar la actual coyuntura.
“Reiteramos nuestra predisposición para atender y apoyar a superar los problemas financieros que pueden estar enfrentando los prestatarios”, dijo el secretario ejecutivo de Asoban, Nelson Villalobos.
El ejecutivo sostuvo que, hasta octubre de 2022, la cartera reprogramada total alcanzó a $us 5.070 millones, lo que representa el 19% del total de la cartera.
Asoban aclaró que la reprogramación considera revisar plazos, tasas de interés, montos de cuotas a pagar e incluso periodos de gracia, sin afectar la calificación de riesgo, permitiendo incluso que los clientes accedan a nuevos créditos.
Villalobos indicó que la cartera de créditos registra crecimiento (7%) y que el índice de mora se mantiene en niveles razonables (2,2%), y que con las medidas de reprogramación se busca que no se deteriore la calidad de la cartera.
Según cifras de Asoban, el monto total de los créditos diferidos hasta diciembre de 2020 llegó a $us 3.543 millones. “Hasta octubre de esta gestión, se mantiene un 53% de esta cartera diferida, que alcanza en capital e intereses a $us 1.861 millones”, finalizó.
Desde la Asociación de Entidades Financieras Especializadas en Microfinanzas (Asofin) informaron que sus entidades buscarán las soluciones más adecuadas para sus clientes afectados por el paro y los fenómenos climatológicos registrados en diferentes regiones del país.
Al cierre del primer semestre de 2022, la cartera de microcrédito tiene una participación del 29,3% en el Sistema Financiero Nacional, siendo aún más importante la cantidad total de clientes de créditos que son atendidos en sus necesidades por los bancos de microfinanzas.
El director general ejecutivo de la ASF, Reynaldo Yujra, dijo que no se tienen datos precisos acerca del número de operaciones y montos de créditos que están siendo reprogramados por prestatarios afectados por el paro en Santa Cruz y los fenómenos climatológicos (sequías, heladas y lluvias extremas).
Según la ASFI, algunos podrán optar por aminorar su cuota mensual de pago, otros podrán requerir una ampliación de plazo, y habrá quienes requieran unos meses de gracia a capital e intereses. “Cada prestatario deberá elegir la alternativa más conveniente para su situación”, dijo.
Fuente: El Deber