Argentina lanzó este viernes la licitación para la reversión de un gasoducto y otras obras complementarias que serán clave para abastecer al norte del país de gas natural producido en la colosal formación de hidrocarburos no convencionales de Vaca Muerta, sustituyendo las importaciones desde Bolivia.
La obra permitirá llevar gas desde Vaca Muerta, en el suroeste de Argentina, a las provincias de Córdoba, Tucumán, La Rioja, Catamarca, Santiago del Estero, Salta y Jujuy, para abastecer la demanda de centrales térmicas de generación eléctrica, industrias y hogares y permitir el desarrollo a escala de nuevas actividades, especialmente la minería de litio y cobre.
Además, potencialmente permitirá exportar gas hacia el norte de Chile, al centro de Brasil y a Bolivia.
“Con esta obra fomentamos el trabajo argentino, garantizamos abastecimiento energético y abaratamos costos”, destacó el ministro de Economía argentino y candidato presidencial, Sergio Massa, en un acto en Córdoba.
El proyecto demandará una inversión de 710 millones de dólares, de los cuales 540 millones serán financiados con un crédito de CAF Banco de Desarrollo de América Latina, organismo al que Massa agradeció especialmente el acompañamiento en esta iniciativa.
La obra, que se prevé que esté lista para mediados de 2024 y generará 3.000 puestos de trabajo directos y 12.000 indirectos, implicará la ampliación en 62 kilómetros del Gasoducto Norte, la reversión del sentido de inyección de gas en cuatro plantas compresoras ya existentes, y la construcción de un gasoducto de 122 kilómetros en la provincia de Córdoba.
La secretaria de Energía argentina, Flavia Royon, destacó que esta obra va a posibilitar que el país no dependa más de las importaciones de Bolivia, cuyas reservas de gas declinan, y permitir un ahorro por sustitución de importaciones, calculado en 1.960 millones de dólares anuales.
EN CAMPAÑA
Massa, uno de los principales candidatos para las elecciones presidenciales de octubre próximo, afirmó que Argentina está “terminando de recorrer la salida de la crisis” y que lo que está por delante es “desarrollo, inclusión y la construcción de un país federal”.
Sostuvo que aspira a convertirse en presidente a partir del próximo 10 de diciembre y tener a todos “sentados en la mesa participando” de su eventual Gobierno.
“A partir del 10 de diciembre, terminada la batalla (electoral), viene el tiempo de abrazar a todos y convocar a un gobierno de unidad nacional”, señaló.
Fuente: EFE