La producción de etanol -alcohol anhidro- ya logró sustituir el 25% del consumo de gasolina en el mercado interno, reveló el exministro de Hidrocarburos (2006-2019), Luis Alberto Sánchez, aunque no precisó en cifras cuánto significa esta variable para las arcas fiscales.
Con cifras aproximadas que tiene el gobierno, el Tesoro General, eroga un promedio de 1.200 millones de dólares, anualmente, por la compra de gasolina y diésel. Desde hace más de una década los precios de combustibles en Bolivia son fijos. En todo el territorio la gasolina cuesta 3,74 bolivianos; el diésel, 3,72, y el GLP, 22,50. Los precios no se mueven desde diciembre de 2010 cuando hubo el denominado gasolinazo.
“En la actualidad, la capacidad de la producción de etanol representa el 25% del consumo de gasolina del país. Entonces, en la línea de reducir las emisiones de carbono, Bolivia debe apostar al incremento de la producción y uso del etanol en el transporte y la bioenergía generada a partir del bagazo de los ingenios azucareros…”, señaló la exautoridad en una columna de opinión que publicó sobre el tema en un periódico local en La Paz.
La posición reforzó una línea de trabajo que el gobierno del presidente, Luis Arce, decidió también abrazar, es decir, sustituir los combustibles de origen fósil con energías no convencionales.
Como parte de esta estrategia, los ministros de Hidrocarburos y Economía, Franklin Molina y Marcelo Montenegro, respectivamente, rubricaron un acuerdo productores de caña del departamento de Santa Cruz para comprar 160 millones de litros de etanol el próximo año, 50 millones más que los concertados para este año (110 millones de litros).
Molina aseguró que esta cantidad de etanol “permitirá al Estado ahorrar porque se disminuirá la importación de gasolina, lo que además significa que avanzamos en las políticas nacionales de sustitución de importaciones y de cuidado del medio ambiente”.
Según Sánchez, otro efecto significativo para el país que dejará el uso del etanol “…será el desplazamiento de importantes volúmenes de gas que pueden ser exportados a mayores precios, incrementándose en ocho veces los ingresos para nuestro país…”
El empresario Carlos Rojas del Ingenio Guabirá, aseguró que el sector cañero busca fortalecer el programa del etanol, “…ya que la producción de biocombustibles les favorece directamente (pues genera) mayores oportunidades de ventas de alcohol anhidro…”
En respaldo a esta posición, el presidente de la Comisión Nacional de Productores Cañeros (Concabol), Oscar Alberto Arnez, destacó que (el acuerdo) permitirá seguir creciendo como productores y respalda el desarrollo del sector.
Para Sánchez que durante su gobierno hizo caso omiso a la promoción de energías renovables, pues apostó más a la extracción de gas y petróleo “…Bolivia tiene un alto potencial (para) seguir aportando a la descarbonización de la matriz energética a través de la implementación y desarrollo de proyectos en el sector transporte, que genera las mayores emisiones de carbono…” en el Estado.
La situación del uso de combustibles de origen fósil en el mundo, sufrió transformaciones. En ese sentido, el planeta ahora vuelca iniciativas, serias e incluso, muy lucrativas, para la producción de biocombustibles, que ahora tiende a crecer.
Sánchez reveló en sus comentarios, por ejemplo, que las energías no convencionales tienen “…apreciarse por la fijación de precios de carbono, el aumento del precio del petróleo, (pero demás por) la comercialización de créditos de descarbonización”.
El etanol que es derivado de la planta de caña “…poseen un elevado componente de biomasa que aporta cantidades importantes de carbono orgánico al medio (ambiente). El cultivo de la caña de azúcar podría estar contribuyendo significativamente (a mitigar) con el cambio climático (…) los suelos sembrados con caña están capturando y fijando, en promedio por hectárea y por año, cerca de 312 kg de CO2”, subrayó Sánchez.
Los biocombustibles reducen, de hecho, la emisión de gases de efecto invernadero en el corto plazo, incrementando los volúmenes de mezcla de etanol en la gasolina, además se convierte en un combustible más potente, subrayó el exministro.
Fuente: Brújula Digital