YPFB proyecta construir segunda planta de urea con apoyo de Brasil

La estatal petrolera contempla invertir $us 2.500 millones en un complejo petroquímico. Estará ubicado en Puerto Quijarro. Los ingresos por exportaciones de gas cayeron en un 44,38% en 2022.

El Gobierno del presidente Luis Arce Catacora busca redoblar la apuesta del plan de industrialización del gas que llevó adelante el expresidente Evo Morales. Este año, la estatal anunció la construcción de una nueva planta de urea. Según las primeras proyecciones, tendrá el doble de las dimensiones con relación al actual complejo petroquímico ubicado en la localidad de Bulo Bulo. La caída de los ingresos por la exportación de hidrocarburos no frena la idea oficialista, incluso se han sentado las bases que la construcción de la obra sea financiada con recursos externos.

Recientemente, medios del Estado informaron que incluso Brasil está dispuesto a financiar la construcción de esta planta ante la alta demanda que el fertilizante tiene en el país vecino.

En reciente encuentro en Brasilia, el ministro de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento del Estado brasileño, Carlos Fávaro, informó mediante sus redes sociales, que en el encuentro con autoridades bolivianas se tocaron el financiamiento de varios proyectos. Entre este listado está justamente la segunda planta de urea que se prevé instalar en la localidad de Puerto Quijarro.

Según información divulgada por Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos, la obra tendrá un costo de $us 2.500 millones, más del doble del costo de la planta urea en Bulo Bulo.

En julio, la estatal declaró desierta la licitación del proyecto, alegando que las empresas que se presentaron no cumplieron con los requisitos exigidos.

El especialista en hidrocarburos Hugo Del Granado señaló que ante la caída de los ingresos por las exportaciones de gas, el que se busque alternativas para financiar este complejo es factible, tomando en cuenta la gran demanda que tiene este fertilizante.

No obstante, sostiene que uno de los mayores problemas que tendrá la nueva planta es el suministro de la materia prima. Explicó que la planta de Bulo Bulo tiene un consumo de 4 millones de metros cúbicos diarios de gas natural (MMm3d), para una producción de más de 2.000 toneladas.

La segunda Planta de Urea y Amoniaco tendrá una capacidad de producción de 4.200 toneladas métricas (TM) día de urea y 2.400 TM día de amoniaco, además de metanol, lo que incrementará en 200% la producción nacional del agrofertilizante.

El proyecto petroquímico de Bulo Bulo, según la consultora Gas Energy Latinoamérica (GELA), entre las gestiones 2018 y 2019 arrojó perdidas por $us 34,4 millones. La industria demandó una inversión de $us 953 millones y fue inaugurada en 2017.

Caída de ingresos

El anuncio de la construcción de una nueva planta se da cuando los ingresos generados por la exportación de gas natural cayeron hasta en un 63%, con relación al periodo de auge de este negocio.

Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el valor de las ventas externas de gas natural pasó de $us 6.113 millones, en 2013, a $us 3.400 millones en 2022, lo que significa una caída de hasta un -44,38 %.

Sin embargo, desde la estatal apuntan a consolidar la construcción de la nueva planta ante el incremento de la demanda del fertilizante a escala global.

Recientemente, el sitio Correio do Estado informó que Bolivia y Brasil planean construir una nueva planta en el estado de Mato Grosso do Sul.

Esta sería la segunda en esta región brasileña porque existe otra (UFN3) de Petrobras, cuyas obras están paralizadas desde 2015 y se necesitaría cerca de $us 1.000 millones para concluirla.

Álvaro Ríos, ex ministro de Hidrocarburos, consideró que antes de que el país se embarque en un proyecto tan grande, primero hay que hacer funcionar la planta de Bulo Bulo “de forma constante” y tomar en cuenta todos los problemas que tiene esa factoría.

Fuente: El Deber

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