La firma produce 36 toneladas mensuales y ofrece cuatro variedades de bolsas.
Una empresa boliviana transforma almidón de yuca en bolsas biodegradables que se descomponen en 180 días en sus componentes básicos: carbono, oxígeno e hidrógeno. A diferencia de las bolsas convencionales, fabricadas de plástico, las cuales pueden tardar entre 100 y 400 años en degradarse.
Se trata de Hidrobag Bolivia, una firma asentada en el departamento de Santa Cruz, misma que produce diversos tipos de bolsas orgánicas fabricadas a partir de polímeros naturales que después de su uso se convierten en abono, de esta manera, la empresa busca reemplazar las bolsas de plástico convencionales, uno de los principales contaminantes del medio ambiente en el país.
“Como grupo corporativo llevamos en nuestros genes la innovación, la eficiencia y el cuidado del medio ambiente; esto nos ha permitido siempre estar a la vanguardia en el desarrollo de tecnologías que vayan de la mano con dicho objetivo”, manifestó Ibert Ayala Cortez, gerente general de la industria nacional.
La empresa opera en el Parque Industrial Latinoamericano (PILAT), en Santa Cruz, desde septiembre de 2022 donde ha instalado una planta con una capacidad máxima de producción de 36 toneladas mensuales de producto terminado. Conforme la demanda vaya creciendo, la empresa tiene proyectada una expansión modular incorporando más líneas de producción.
Hidrobag Bolivia elabora cuatro tipos de bolsas, cada una de ellas en diferentes tallas (S, M, L y XL) para atender a los distintos tipos de requerimientos del mercado masivo y empresarial. La bolsa Buybag es especial para supermercados, la Gripbag es normalmente usada en comercio de ropa y alimentos, la bolsa Trashbag para el recojo de basura y la Poopybag para los desechos de mascotas.
Además, pueden atender pedidos especiales y personalizar tanto el largo, ancho y espesor de la bolsa, como las impresiones.
Biodegradables
Hidrobag Bolivia produce bolsas que tienen un origen 100% orgánico, puesto que provienen de un biopolímero que se extrae del almidón de la yuca.
“Es fundamental que el público sepa distinguir, realmente, entre un producto biodegradable versus productos que se comercializan como biodegradables. Nuestras bolsas son las únicas que al término de 180 días se reintegran a la tierra de manera natural en sus elementos básicos: carbono, oxigeno e hidrogeno”, explicó el gerente general de Hidrobag Bolivia.
Estas bolsas además de ser biodegradables, son compostables e hidrosolubles, vale decir que las mismas se pueden disolver en agua caliente a partir de los 80 grados de temperatura
“El éxito del proyecto Hidrobag en los próximos años representará no sólo una expansión en el mercado, sino que también implicará que en los siguientes años habremos colaborado con la reducción de la contaminación, disminución de las emisiones de CO2, la preservación de la flora y fauna, entre otras acciones. Todo ello a través de generar conciencia en la disminución del uso de bolsas plásticas de un solo uso, y la adopción de nuevos materiales amigables con nuestro medio ambiente”, destacó Ibert Ayala.
Fuente: Página Siete