Roca arribó al país a las 06h30 locales, al aeropuerto internacional de Viru Viru, en Santa Cruz, en un vuelo de la aerolínea estatal Boliviana de Aviación (BoA).
“Yo vengo a Bolivia porque tengo que recuperar la dignidad, y tengo que recuperar no solo mis bienes, sino también la dignidad de mucha gente y a poner la cara, además”, dijo.
Roca lamentó que en el Gobierno de Morales lo hayan acusado “sin ningún tipo de pruebas” de enriquecimiento ilícito, de ser evasor de impuestos y mal administrador cuando estuvo al mando de Aerosur, hoy inexistente.
“Han mellado mi dignidad y no solamente eso, me han quitado la nacionalidad y me votaron y no pude volver al país, no pude hacer documentos bolivianos, no podía hacer nada”, denunció.
El expropietario de Aerosur dijo que recibió ese tipo de trato solo por acusar al Gobierno de Morales de “narcotraficante, corrupto y ladrón”; sin embargo, dijo que durante su estadía “dará la cara” ante la justicia y recuperará su reputación.
Según la defensa de Roca, la primera misión que se trazó el empresario es el inicio de procesos contra los que considera responsables de la quiebra y desmantelamiento de su empresa: Evo Morales, Álvaro García Linera, Nardi Suxo y Luis Arce, este último candidato del MAS a la presidencia para las elecciones del 3 de mayo.