Shock de medidas económicas. La Fundación Utopía planteó este martes un conjunto de medidas económicas y sociales con el objetivo de mitigar los impactos que tendrá en la economía la pandemia del Coronavirus, que amenaza la quiebra de empresas, despido de trabajadores, caída de los ingresos de las familias, incremento de los niveles de pobreza y por ende, una eclosión social de consecuencias. Las medidas se resumen en un ‘perdonazo’ tributario, reducción de tasas de impuestos, bono de desempleo, fondos para inversión y promoción del empleo, rescate de empresas y subsidios de servicios básicos.
La Fundación Utopía es una institución conformada por profesionales de las áreas de Economía, Administración, Ciencias Jurídicas, Comunicación e Ingeniería. Fue creada con la misión de promover y gestionar proyectos que contribuyan al desarrollo del conocimiento, la investigación y la innovación en el campo socioeconómico. José Alberti (expresidente del Colegio de Economistas de Santa Cruz), Juan Carlos Rau (expresidente del Colegio de Economistas de Bolivia y banquero) y Javier Peralta (formador y ex Rector de la Utepsa) destacan entre los especialistas.
“Se hace imperioso un shock de medidas económicas desde el lado de la oferta de productos y servicios, como de la demanda agregada, orientadas a proteger la vida, preservar el empleo, garantizar la salud y fortalecer la educación”, destaca la organización que promueve la formación integral de las capacidades individuales y colectivas de las nuevas generaciones.
El documento que fue elaborado por destacados profesionales bolivianos miembros de la Fundación, postula un Estado facilitador, actor y promotor del crecimiento económico. Establece un círculo virtuoso de la economía que implica inyectar liquidez, facilitar el financiamiento, estímulos fiscales, flexibilidad laboral, incentivos y subsidios, promoción de la inversión y sostener el empleo.
Entre las medidas financieras se propone la creación de los fondos de inversión productiva, de liquidez sectorial, de fomento a la exportación, flexibilización de normas ASFI en cuanto a requisitos para nuevas operaciones crediticias, reducción de la tasa de encaje legal y los porcentajes de previsiones de cartera para fomentar mayores niveles de colocaciones de créditos.
Las medidas fiscales buscan la aplicación de un perdonazo tributario para todo el universo de contribuyentes, reducción de tasas de los impuestos al Valor Agregado -IVA, a las Utilidades -IUE, y a las Transacciones -IT. También la suspensión definitiva del Impuesto a las Transacciones Financieras -ITF y la creación de incentivos tributarios para nuevas inversiones que apuestan a la generación de empleos. En la misma dirección se plantea la reducción de tasas de impuestos a las importaciones para maquinarias, equipos e insumos de la industria de alimentos, farmacias y salud.
Para el fomento del empleo, se postula la creación de un bono de desempleo por tres meses, fondo de apoyo a la creación de empleos, congelamiento del salario mínimo y el pago adelantado del aguinaldo 2020 a los jubilados.
Las iniciativas de promoción de la inversión establecen subsidios al consumo de servicios básicos, rescate de empresas estratégicas, creación de zonas económicas especiales en cuatro puntos estratégicos del país y fondos no reembolsables para micros, pequeñas y medianas empresas.
En materia de inversión pública se plantea concretar compras de equipos e insumos médicos, asignar mayores montos al presupuesto de salud, crear un fondo financiero para salud que permita dotar de infraestructura hospitalaria y el pago de las planillas de avance de obras de las empresas que prestan servicios al Estado. Además de garantizar la liquidez de los gobiernos departamentales y municipales para que inyecten recursos a las regiones.