Al menos 22 personas murieron y dos decenas resultaron heridas en Afganistán en un ataque el lunes con armas de fuego y explosivos contra la universidad de Kabul, la más importante del país, que fue reivindicado por el Estado Islámico (EI).
El ataque, que terminó al cabo de varias horas de combates con las fuerzas de seguridad, representa el segundo en menos de dos semanas que el EI comete contra un centro educativo en la capital afgana.
Los supervivientes describieron escenas de horror que se vivieron después de que alrededor de las 11H00 (05H30 GMT) un hombre se hiciera estallar dentro del campus universitario.
Entonces, según las fuerzas de seguridad, dos hombres empezaron a disparar contra los estudiantes, que salieron en desbandada del centro.
“Estábamos en nuestras aulas cuando de pronto escuchamos una ráfaga de disparos adentro de la universidad”, dijo Fraidoon Ahmadi, de 23 años.
“Estábamos muy asustados y pensábamos que podría ser el último día de nuestras vidas. Los chicos y chicas rezaban y gritaban pidiendo ayuda”, añadió este estudiante, quien explicó que él y varios compañeros estuvieron asediados durante más de dos horas antes de ser rescatados.
Imágenes compartidas en las redes sociales mostraban los cuerpos de estudiantes ensangrentados que yacían entre las sillas y las mesas de las aulas.
“Hubo tres atacantes. Uno de ellos hizo estallar sus explosivos, y los otros dos fueron abatidos por las fuerzas de seguridad”, dijo a la AFP el portavoz del Ministerio del Interior, Tarik Arian.
El portavoz de la policía de Kabul, Ferdaws Faramerz, explicó a la AFP que todas las víctimas son estudiantes, entre las cuales hay diez mujeres.
Pocas horas después del ataque, el EI reivindicó la autoría del atentado a través de un comunicado de su agencia de propaganda Amaq.
“Dos combatientes del Estado Islámico atacaron un acto del gobierno afgano en la universidad de Kabul coincidiendo con la graduación de jueces e investigadores”, afirmó Amaq a través de la mensajería electrónica Telegram.
Sucesión de ataques en centros educativos
El ataque se produjo poco antes de la llegada de autoridades afganas en la universidad de Kabul, donde tenían previsto inaugurar una feria de literatura iraní, según explicó a la AFP el portavoz del Ministerio de Universidades, Hamid Obaidi.
El presidente afgano, Ashraf Ghani, prometió “vengarse de este ataque sin sentido y de cada gota de sangre de los estudiantes inocentes”.
“Este atentado no quedará sin respuesta, responderemos”, añadió el jefe de Estado, quien anunció que el martes se celebrará un día de duelo nacional.
El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres, “condenó firmemente” el ataque y exigió que los responsables sean llevados a la justicia.
“Este espantoso ataque, el segundo en diez días contra una escuela en Kabul, es también un ataque al derecho humano a la educación”, aseguró.
Grupos extremistas como el Estado Islámico (EI) suelen cometer atentados en escuelas y universidades en Afganistán.
Al menos 24 personas, la mayoría de ellas estudiantes, murieron la semana pasada tras un atentado con explosivos, revindicado por el EI, en un centro educativo en el oeste de Kabul.
Un kamikaze del EI también se hizo estallar en 2018 delante de la universidad de Kabul, donde perdieron la vida 12 personas.
Stefano Pontecorvo, el enviado especial de la OTAN en Afganistán, aseguró que los “niños y los jóvenes afganos deben poder ir a la escuela en seguridad. La OTAN apoya todos los esfuerzos para acabar con la violencia”.
“El ataque de hoy contra la universidad de Kabul es un acto de terrorismo despreciable. La Unión Europea lo condena en los términos más enérgicos”, afirmó, por su lado, el portavoz del canciller europeo Josep Borrell.
Los atentados siguieron repitiéndose en los últimos meses en territorio afgano a pesar de que el gobierno y los talibanes empezaron unas negociaciones de paz en septiembre en Doha (Catar).
AFP.