Las fuerzas armenias y azerbaiyanas en Nagorno Karabaj no daban ninguna señal de tregua este jueves, antes de una primera reunión en Ginebra de los mediadores internacionales en el conflicto.
Los bombardeos azerbaiyanos continuaron durante toda la noche en Stepanakert, la capital del territorio separatista, según periodistas de AFP en el lugar, así como en zonas pobladas de Azerbaiyán, según las autoridades locales.
Rusia, Estados Unidos y Francia, copresidentes del llamado Grupo de Minsk dentro de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) se reúnen este jueves en Ginebra con el ministro de Relaciones Exteriores de Azerbaiyán, Ceyhun Bayramov.
El Grupo de Minsk actúa como mediador en este conflicto desde los años 1990. La primera guerra entre separatistas armenios y fuerzas azerbaiyanas en los años 1990, tras la caída de la Unión Soviética, dejó 30.000 muertos.
“El objetivo de la visita es (…) presentar la posición de Azerbaiyán sobre la solución del conflicto”, dijeron los diplomáticos azerbaiyanos.
Azerbaiyán dice estar decidido a reconquistar Nagorno Karabaj, una región separatista poblada principalmente por armenios, aunque sea por la fuerza de las armas y sostiene que solo una retirada de las fuerzas separatistas y armenias podría poner fin al conflicto.
Bombardeos continuos
En este contexto, una portavoz de la diplomacia armenia descartó una reunión de ministros azerbaiyanos y armenios en Ginebra, porque “no se puede negociar con una mano y realizar operaciones militares con la otra”, y denunció la agresión de Azerbaiyán contra Nagorno Karabaj.
Por eso se espera que el jueves no hay haya representación armenia en Ginebra.
Sin embargo el jefe de la diplomacia armenia será recibido el lunes en Moscú por su homólogo ruso, Serguéi Lavrov.
En el terreno, en el duodécimo día de combates seguían los bombardeos en zonas habitadas sin ningún signo de apaciguamiento a ambos lados del frente.
Según las autoridades separatistas, la mitad de los aproximadamente 140.000 habitantes de Nagorno Karabaj han sido desplazados por el conflicto.
Stepanakert, la capital de la autoproclamada república de Nagorno Karabaj, fue de nuevo blanco de bombardeos azerbaiyanos en la noche del miércoles al jueves, indicaron periodistas de la AFP.
Durante la noche sonaron sirenas de advertencia a intervalos regulares en la ciudad, seguidas de fuertes explosiones, en grupos de tres o cuatro, que hicieron temblar el suelo.
Rusia y Turquía
No se conoce con certeza el tipo de armas utilizadas por las fuerzas azerbaiyanas, pero las autoridades locales dijeron que los bombardeos de zonas urbanas utilizan cohetes Smerch de 300 mm.
En Stepanakert se podían ver artefactos sin explotar, aparentemente de este modelo. Muchas casas quedaron completamente destruidas por los disparos, con cráteres a veces de hasta 10 metros, reflejo de la potencia de las bombas utilizadas.
También se ven drones volando regularmente sobre la ciudad, sobre todo durante el día, y llevan a cabo disparos aislados, aparentemente con objetivos específicos.
Azerbaiyán acusó por su parte este jueves a los separatistas armenios de haber “disparado contra zonas habitadas” por civiles, citando los distritos de Bardinsk, Agdjabedin, Goranboy, Terter y Agdam. “Hay muertos y heridos”, según el ministerio de Defensa de Azerbaiyán.
En el frente, el ministerio de defensa de Karabaj juzgó que la situación es “estable pero tensa durante la noche”. “Los combates se reanudaron [por la mañana] en el norte y el sur”, indicó.
El balance oficial de los combates desde el 27 de septiembre es de entre 300 y 400 muertos, entre ellos unos 50 civiles.
Pero sigue siendo muy parcial y Azerbaiyán no anuncia sus pérdidas militares. Ambos bandos afirman haber eliminado cada uno a miles de soldados enemigos.
En el extranjero, el temor es que el conflicto se vuelva internacional, en una región donde Rusia, Turquía, Irán y los países occidentales tienen sus propios intereses.
Turquía ya fue acusada de participar con hombres y material en el conflicto en apoyo de Azerbaiyán.
El presidente ruso, Vladimir Putin, que tiene un papel de árbitro regional, advirtió que si las hostilidades se extienden fuera de Karabaj al territorio armenio, Rusia cumplirá con sus “obligaciones” derivadas de su alianza con Armenia.
AFP.