Las protestas critican la gestión de la presidenta peruana y exigen su renuncia, y reclaman el adelanto de las elecciones, previstas oficialmente en abril 2024.
La presidenta de Perú, Dina Boluarte, aseguró el viernes que no dimitirá del cargo, a pesar de la fuerte presión política y las manifestaciones en las calles que han dejado 42 muertos.
“Algunas voces que salen de los violentistas y radicales piden mi renuncia, azuzando a la población al caos, desorden y destrozos, a ellos les digo de manera responsable: no voy a renunciar, mi compromiso es con el Perú”, dijo Boluarte en un mensaje al país transmitido por la televisora estatal.
La situación en el país andino ha sido explosiva, con protestas violentas y bloqueos que se han mantenido durante 12 días consecutivos.
El viernes, la ciudad de Arequipa, la segunda del país, vivio una jornada de bloqueo casi completo. La turística Cusco y el tren a Machu Picchu también se vieron afectados por esta situación.
En la fronteriza Tacna, 1.220 km al sureste de Lima, hubo marchas, por lo que el vecino Chile decidió cerrar sus pasos.
Las protestas critican la gestión de Boluarte y exigen su renuncia, y reclaman el adelanto de las elecciones, previstas oficialmente en abril 2024. En las manifestaciones se escuchan pedido de convocatoria a una Asamblea Constituyente que reclaman desde 2021 los partidos de izquierda y organizaciones campesinas, así como justicia para los responsables de las 42 muertes registradas en enfrentamientos con las fuerzas del orden.
El bloqueo de carreteras, en especial en el sur del país, históricamente marginado, también se ha extendido a zonas de la selva. Mientras, las protestas alcanzaron la capital.
En Lima, manifestantes exigieron el jueves con pancartas el “Cierre del Congreso Ya. Nueva Constitución”, o clamaban “Dina, asesina, renuncia enemiga”, durante una marcha.
Fuente: RFI