Según Manuel Cristopher Figuera, el único objetivo de las instalaciones rusas es “amenazar la seguridad nacional de EEUU”. En medio de las tensiones por Ucrania, el Kremlin amenazó con desplegar misiles en América Latina.
Manuel Cristopher Figuera, ex director de la Inteligencia venezolana y desertor del régimen de Nicolás Maduro, denunció que en Venezuela funcionan dos bases militares rusas. La revelación llega días después que el Kremlin amenazara con desplegar misiles en América Latina en medio de las tensiones con EEUU por Ucrania.
En un comunicado, el ex director del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional incluso señaló los lugares en donde las bases estarían ubicadas: una está se encuentra dentro de la 41° Brigada en Valencia, Carabobo, y la otra en Manzanares, estado Miranda, donde funciona la Base Militar Rusa de Exploración de Comunicaciones e Inteligencia, que protege al dictador venezolano.
Según Figuera, el “único objetivo” de las instalaciones rusas es “amenazar la seguridad nacional de EEUU”.
Ya se sabía la presencia de militares rusos en Venezuela, reforzada después de que Juan Guaidó se proclamara presidente interino con el apoyo estadounidense en 2019, pero hasta el momento no se conocía de bases propiamente dichas.
Las revelaciones ocurren días después que Moscú advirtiera sobre el posible despliegue de infraestructura militar en Cuba y Venezuelaen medio de la crisis entre Rusia y Estados Unidos por Ucrania.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, pronuncia su discurso anual a la nación durante una sesión especial de la Asamblea Nacional, en Caracas, Venezuela, el 15 de enero de 2022. (REUTERS/Leonardo Fernández Viloria)
“Es tal la entrega de soberanía que el Gobierno ruso, haciendo uso de un derecho abrogado, recientemente, en el tablero geopolítico mundial de negociaciones ante la crisis en Ucrania, generada por Rusia para frenar el supuesto avance de la OTAN en territorios de Europa del Este, amenazó con colocar en Venezuela más infraestructura y medios militares de gran nivel”,dijo Figuera.
“Es evidente que el régimen dictatorial y delincuencial de Nicolás Maduro es una amenaza no solo para la seguridad Estados Unidos, sino para la región latinoamericana y el resto del mundo libre. Ya que es la sede de operaciones de grupos irregulares narcoterroristas de delincuencia organizada, grupos extremistas islámicos, caldo de cultivo para la exportación de terrorismo y delincuencia internacional”, dijo Figuera en el comunicado.
El ex funcionario chavista, quien desertó en 2019 y actualmente colabora con las autoridades de EEUU, dijo que el régimen de Maduro “ha contado con la complicidad de potencias extranjeras y otros países con alta experiencia en tiranías; con la de organismos internacionales como la Unión Europea y la Organización Naciones Unidas y hasta el mismo Vaticano.
“Ya que sus representantes y en Venezuela y sus aparatos de inteligencia saben con exactitud la desgracia que viven la gran mayoría de los ciudadanos venezolanos en el territorio venezolano y fuera de él, así como también, saben las causas de tal desgracia”, agregó.
En la carta, dirigida a los venezolanos, Figuera también dirige fuertes críticas al ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, indicando que utiliza una falsa retórica revolucionaria para recuperar la soberanía de Venezuela.
El ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, en una fotografía de archivo. EFE/MIGUEL GUTIERREZ
Como ejemplos citó los equipos y medios militares que Venezuela adquirió de Cuba, Irán, Rusia y China, y que según Figuera es en su mayoría “chatarra repotenciada y que solo se han constituido en negocios para crear intereses y así promover una falsa defensa de la patria”.
El ex jefe de Inteligencia calificó a Padrino López como “el más grande traidor” y le pidió que no involucre a los venezolanos en otro conflicto “para sus intereses y los de su amo” Maduro.
Asimismo lo acusó de ser el culpable de la desprofesionalización dentro de la Fuerza Armada Nacional (FAN) y aseguró que la penetración de la guerrilla colombiana en Venezuela tienen el beneplácito y la complicidad del alto funcionario y del Ejecutivo.
Fuente: Infobae