Paraguay: grupos sociales llevan protestas ante el Congreso

Su intención es instalar una “carpa de la resistencia” y permanecer ahí hasta que el Congreso atienda sus demandas para la reactivación económica ante la pandemia.

Cientos de personas campesinas, indígenas e integrantes organizaciones sociales marcharon este martes por Asunción hasta el Congreso para trasladar a las bancadas legislativas sus respectivas demandas relacionadas con la reactivación económica del país sudamericano ante la pandemia del coronavirus.

Manifestantes acampan en los alrededores de la Plaza Uruguaya y la Estación de Ferrocarril, también en el centro de Asunción, donde instalaron sus carpas, colchones y ollas, con la intención de permanecer ahí hasta que sean recibidos por representantes de los tres poderes del Estado. Entre sus reclamos está la condonación de las deudas y el derecho a la tierra, además de una ayuda que tenga en cuenta el impacto de la pandemia y de la sequía en la cosecha de los pequeños productores.

Dirigentes campesinos, procedentes de departamentos agrícolas como San Pedro, Caazapá o Caaguazú, aseguran que la condonación de la deuda es una promesa que se comprometió a cumplir el pasado año el presidente Mario Abdo Benítez a través de una refinanciación a plazos. Esta es una demanda que originó manifestaciones en la capital liderada por la Coordinadora Nacional Intersectorial (CNI) que este martes transitó con banderas paraguayas, bocinas y vigilada por un cordón policial.

Foto de manifestantes que acampan en la capital paraguaya

Al mismo tiempo que las personas campesinas marchaban por el microcentro de Asunción, también lo hacían grupos y movimientos sociales que reclamaban la reactivación económica de la construcción y de las viviendas sociales. Frente al Congreso, cientos de personas pedían presupuesto para la construcción de 25.000 viviendas sociales en todo el país, que a su vez también dé un alivio a las pequeñas y medianas empresas dedicadas a la construcción.

“Nuestra reivindicación en el día de hoy es instar a los parlamentarios a aprobar inmediatamente el plan de reactivación económica del Paraguay”, dijo a la prensa internacional Marta González, del servicio de asistencia técnica de la Asociación Ñanderekoha, que trabaja con el Ministerio de Urbanismo. “Esto es de carácter urgente, con la aprobación de 47 millones de dólares para la construcción de vivienda a través del Fondo Nacional de Vivienda Social (FONAVIS)”, añadió.

Su intención es quedarse en Asunción hasta el jueves e instalar -en este tiempo- una “carpa de la resistencia”, aunque no descartan marcharse antes si el Congreso aprueba sus pedidos.

DW.

Comentarios