El Tribunal de la Corte Nacional de Justicia de Ecuador declaró este martes culpable de corrupción al ex presidente Rafael Correa y lo sentenció a ocho años de prisión.
Correa fue condenado junto a otros 19 altos funcionarios y empresarios involucrados en una red de millonarios pagos ilegales a cambio de la entrega de obras públicas.
El juez Iván León leyó la sentencia y dijo que la víctima del delito es el Estado y que la “fiscalía demostró la existencia de una estructura de corrupción”.
En la lectura que tomó casi dos horas, los principales acusados, el exmandatario Rafael Correa y el exvicepresidente Jorge Glas fueron sentenciados a 8 años de prisión por cohecho agravado. Además, ambos pierden sus derechos políticos por 25 años.
Esta es una sentencia de primera instancia.
En la lectura de su análisis del caso, el Tribunal determinó que el expresidente Rafael Correa conocía de los “aportes indebidos”. Además, de que se ha comprobado que los pagos realizados a la estructura eran reportados al nivel jerárquico superior, es decir a Rafael Correa y al exvicepresidente Jorge Glas.
Sobre Rafael Correa, el juez dijo: ‘tanto dinero no puede ocultarse fácilmente, mucho menos si era manejado por su asesora Pamela Martínez, por lo que el Tribunal considera que Rafael Correa efectivamente tenía conocimiento de los fondos indebidos para posicionar su movimiento político’.
El ex mandatario actualmente vive en Bélgica junto a su familia desde mayo de 2017, luego de traspasar el poder a su amigo y sucesor Lenín Moreno, con quien se distanció poco después en medio de acusaciones mutuas.
Desde Twitter Correa aseguró que la condena es “un show y ya estaba preparado”.
“Les dije que todo era un show y ya estaba preparado. Con filtración de ayer solo cambiaron tipo de autoría mediata por ‘dominio de organización, a autoría mediata por ‘infracción del deber’, y pusieron agravantes porque están furiosos con la filtración. Me duelen mis compañeros”, escribió Correa en la red social. Sus compañeros son los otros funcionarios condenados.
Y agregó en otro tuit: “Bueno, esto era lo que buscaban: manejando la justicia lograr lo que nunca pudieron en las urnas. Yo estoy bien. Me preocupan mis compañeros. De seguro ganaremos a nivel internacional, porque todo es una mamarrachada, pero toma años. De tu voto depende que esta pesadilla acabe”.