Tras un mes de haberse aplicado el estado de alarma en España, este lunes los trabajadores de servicios no esenciales como la construcción y la industria han retomado sus actividades, pese al rechazo de sectores políticos y ciudadanos, dado el índice de casos que aún prevalece.
Se trata de un plan que pretende recuperar una cercana normalidad con medidas graduales y será el servicio de Sanidad de este país que se encargue de dar las recomendaciones a las empresas para hacer efectivo el manejo de prevención del coronavirus.
Los ingresos a las fuentes laborales serán de forma escalonada, habrá reducción de los turnos, cierre de áreas comunes, mantenimiento de la distancia de seguridad entre empleados (al menos de un metro), toma de la temperatura y los mecanismos para el permanente lavado de manos.
Al momento, España es el segundo país con mayores cifras de casos luego de Estados Unidos. En tiempo real hasta anoche llegó a 166.831 personas contagiadas y 17.209 fallecidos. Pese a tener variaciones positivas en pasados días, las últimas 24 horas registraron un aumento de muertes, de 510 a 619 en una sola jornada.
“No tengo ni tendré otro enemigo más que el virus. La desescalada de la tensión política debe comenzar ya”, dijo el presidente Pedro Sánchez al momento de dirigirse a su país en su informe habitual durante esta pandemia.
El mensaje se da justamente en la jornada 33 del confinamiento y en una semana en la que el gobierno buscará el respaldo del sector empresarial y el consenso político para reconstruir la economía a través de diversos pactos, detalla el diario El País.
Hoy culmina el periodo más estricto del confinamiento y miles de trabajadores retornan a sus puestos, sin embargo, se ha dispuesto 15 días más de aislamiento.
