La Justicia estadounidense estudiará si es legal el uso de fondos asignados al Pentágono por parte del gobierno republicano para financiar el muro con México, una de las principales promesas de campaña de Trump en 2016.
La Corte Suprema de Estados Unidos decidió hoy examinar la legalidad de dos temas emblemáticos de la política migratoria del presidente Donald Trump: la financiación de un muro fronterizo en el sur del país, y el programa “Quédate en México” para miles de solicitantes de asilo.
Las audiencias sobre estos casos probablemente tendrán lugar después de que el Senado confirme a Amy Coney Barrett como novena jueza del Supremo, con lo que habrá una mayoría de 6 jueces conservadores frente a 3 progresistas en esa corte.
Los jueces escucharán los argumentos de una apelación del Gobierno de Trump contra la decisión de tribunales inferiores que declararon ilegal la transferencia de fondos para la construcción del muro, así como el caso de las personas que llegan a la frontera sur del país solicitando asilo y son enviadas de retorno a México y América Central a la espera de las audiencias sobre sus casos.
La demanda sobre el muro fue una iniciativa de la Coalición de Comunidades de la Frontera y el grupo ambientalista Sierra Club, quienes alegaron que la obra agravará el problema de inundaciones en la región y perjudicará la fauna y la flora silvestres.
El máximo tribunal estadounidense acordó que revisará ambos asuntos después de las elecciones del 3 de noviembre.
DW.