Las autoridades sanitarias piden a la población de zonas endémicas extremar los cuidados preventivos. En temporadas de escasez de lluvia y de aguaceros el roedor suele migrar a áreas pobladas, lo que aumenta el riesgo de contagio.
Las autoridades sanitarias llaman a los pobladores que residen en lugares considerados endémicos a extremar los cuidados preventivos contra el hantavirus, toda vez que durante periodos de sequía y lluvia los roedores silvestres suelen migrar hasta zonas urbanas en busca de alimento, lo que aumenta el riesgo de contagio de la enfermedad.
El viceministro de Promoción y Vigilancia Epidemiológica del Ministerio de Salud, Max Enríquez, confirmó la muerte de un agricultor a causa de este mal en el municipio de Pailón.
Con este caso, el país suma18 confirmados en lo que va del año. De ellos, 7 se registraron en La Paz, 5 en Santa Cruz, 3 en Cochabamba y 3 en Tarija.
Enríquez explicó que el hantavirus es una enfermedad infecciosa, transmitida por roedores.
Aunque es de baja transmisión, se suelen presentar casos en áreas endémicas, es decir, en zonas habitualmente afectadas. “Hay temporadas, tanto de lluvia como de sequía, en las cuales los roedores migran hacia los domicilios en busca de alimento y la persona adquiere el virus por inhalación de excrementos (orina y heces). Ahí empieza el ciclo de la enfermedad”, manifestó.
En este sentido, recomendó proteger los alimentos, sobre todo los granos y otros que están almacenados. Además, pide mantener limpios los alrededores de las viviendas y controlar a los roedores con el uso de productos químicos, como raticidas y rodenticidas.
Sobre la enfermedad
El período de incubación varía de unos pocos días a seis semanas después de la exposición de la persona con el excremento u orina del roedor.
Las personas infectadas pueden tener dolor de cabeza, mareos, escalofríos, fiebre y mialgia. También pueden experimentar síntomas gastrointestinales que incluyen náuseas, vómitos, dolores abdominales y diarrea, seguidos de un inicio repentino de dificultad respiratoria e hipotensión. La detección temprana mejora el resultado clínico.
Los males infecciosos
Un estudio publicado en Nature Climate Change advierte que los peligros climáticos, como las inundaciones, las olas de calor y la sequía han agravado el 58% de las enfermedades infecciosas conocidas en las personas, como la malaria, el hantavirus, el cólera y el ántrax.
Los investigadores revisaron el informe médico de casos establecidos de enfermedades y encontraron que 218 de las 375 enfermedades infecciosas humanas conocidas parecían empeorar por uno de los 10 tipos de clima extremo relacionado con el cambio climático.
El estudio trazó 1.006 maneras en que los riesgos climáticos favorecen que las personas se enfermen. En algunos casos, los aguaceros y las inundaciones derivan en que las personas se contagien a través de mosquitos, ratas o venados transmisores de enfermedades. El calentamiento de los océanos y las olas de calor contaminan los pescados y mariscos y otros alimentos, y las sequías atraen murciélagos con infecciones virales que las transmiten al ser humano.
Fuente: El Deber
