Este viernes, en horas de la tarde, el municipio de Samaipata vivio una tarde de miedo, a raíz de bque un grupo de marchistas afines al Movimiento al Socialismo (MAS), irrumpieron en las calles de esa población, con piedras, palos y, machetes, golpearon a cuanto ciudadano se cruzaba en su camino, además de ingresar a viviendas y comercios, según denuncias de los propios afectados.
Según testimonios, la llegada de estos grupos sorprendió a los habitantes que se vieron reducidos por las amenazas. Los pobladores pidieron auxilio a la Policía y Fuerzas Armadas, pero hasta el momento la ocupación de los marchistas sigue en Samaipata.
Del mismo modo se reportó que gran número de los integrantes de esta marcha ingresaron de forma violenta al hospital de Samaipata, después de apedrear el surtidor que está ubicado al ingreso del pueblo. En el centro asistencial sacaron a golpes a varios médicos, de acuerdo a testimonios de los vecinos del lugar.
Según las denuncias, los marchistas afines al MAS tomaron el pueblo en represalia porque hace dos días los habitantes de Samaipata desbloquearon la zona de El Fuerte, ubicado a 20 kilómetros de la población atacada en esta jornada. En su desesperación, los ciudadanos hicieron repicar las campanas de la iglesia del pueblo, con el fin de pedir unidad de todos los habitantes y en señal de auxilio.
Numerosos testimonios aseguran que estos grupos permanecen aun en el pueblo y amenazan con quedarse toda la noche.
El comandante de la Policía, coronel José Enrique Terán, recibió todos los llamados de auxilio, mientras sostiene una reunión de emergencia para el desplazamiento inmediato de tropas a Samaipata para precautelar el orden y frenar abusos y los hechos de violencia. También se conoció que se instalaron bloqueos en El Fuerte, en Petacas y en Tiquipaya. En este último tramo se conoce que los bloqueadores tienen retenidas ambulancias que no les permiten el paso.
El Deber