El embajador ruso en Bolivia asegura que los últimos estudios validarían aumentar a 180 días la aplicación de la segunda dosis.
El viceministro de Comercio Exterior e Integración, Benjamín Blanco, admite “un retraso de algunos días” en la llegada de las segundas dosis de la vacuna rusa Sputnik V al país. En tal sentido, pide tranquilidad a la población y espera que se normalice la situación con la llegada de 200.000 dosis la próxima semana.
La demora “no va a afectar en la protección” de los bolivianos, asegura Blanco en conferencia junto con el embajador de Rusia en Bolivia, Mikhail Ledenev.
Por el momento no se sabe la fecha exacta de la llegada de estas segundas dosis, aunque “esperemos que los primeros empaques de esas 200 mil dosis que requerimos lleguen pronto”, afirma el viceministro.
La autoridad pide tranquilidad a la población y apela a un estudio realizado en Argentina en el que se indica que la primera dosis aplicada de la Sputnik V cuenta con el “78.6% de efectividad para evitar casos de Covid-19, un 84.7% para evitar la muerte y un 87.6% para reducir las hospitalizaciones”.
La vacuna rusa está compuesta por dos dosis diferenciadas que trabajan sobre dos vectores diferentes. La segunda dosis, más que un refuerzo, se convierte en un complemento para la protección contra el Covid-19, dijo.
Blanco mantiene la confianza en el resultado de esta vacunas y asegura que la campaña de vacunación plantea “fortalecer la primera dosis y alcanzar un mayor número de personas a corto plazo”. Además, insiste en el impacto favorable de la campaña de vacunación para reducir la cantidad de contagios, hospitalizaciones y muertes por Covid-19″.
Bolivia prioridad para Rusia
El embajador de Rusia en Bolivia, Mikhail Ledenev, destacó el lugar de prioridad que ocupa el país para el Gobierno ruso. Bolivia es el tercer país del continente con mayor número de dosis recibidas de la Sputnik V, después de Argentina y México.
Ledenev reconoce “ciertas dificultades” que atraviesa su país para producir la vacuna en grandes cantidades ante la nueva variante, el Delta. El incremento de casos de contagio obliga a Moscú a “escoger entre enviar las vacunas a las regiones de Rusia o a un país extranjero”.
Para tranquilidad de los bolivianos, el embajador asegura que Bolivia “tiene la prioridad entre los países extranjeros”, en parte porque los otros dos países ya cuentan con la capacidad de poder trabajar en sus laboratorios la fórmula de la Sputnik V.
Durante su comparecencia, el representante de Rusia recurrió a “la información del Instituto Gamaleya que (asegura) que la segunda dosis puede esperar medio año, es decir 180 días”.
Resalta también “algunos estudios” que “recalcan que cuanto mayor distanciamiento más fuerza adquiere la segunda aplicación de la vacuna anticovid”.
Fuente: El Deber