La ayuda de España a Bolivia será de más de $us 100 millones para los próximos tres años

Las prioridades del país europeo incluyen programas en favor del fortalecimiento democrático en un escenario marcado por la polarización política, un aspecto que no estuvo en 2018 cuando visitó Bolivia el presidente Pedro Sánchez.

España dará a Bolivia más de $us 100 millones para financiar proyectos medioambientales, de cohesión social y gobernanza democrática; todo esto en el marco de un acuerdo que reemplazará al que estuvo vigente entre 2018 y 2021. La ayuda “no reembolsable” se ejecutará de aquí a 2025, informó a El Deber Francisco Javier Gassó, embajador de la nación europea.

El nuevo entendimiento se dio tras una reunión interministerial de la que participó el ministro de Planificación, Sergio Cusicanqui, y la secretaria de Estado de Cooperación Internacional de España, Pilar Cancela. El encuentro tuvo lugar el 15 de diciembre. “No se ha podido celebrar de forma presencial y la reunión fue virtual”, dijo el diplomático.

“Este convenio marco de cooperación consagra a Bolivia como un país prioritario para la cooperación española sobre la base de tres ejes”, señaló Javier Gassó. El representante recordó que el presidente español, Pedro Sánchez, había anunciado el plan de cooperación que estuvo vigente hasta 2021, durante su visita a Santa Cruz de la Sierra. Sucedió en 2018.

España había expresado, entonces, su participación en el mega proyecto para la construcción de un tren bioceánico, entre el Atlántico y el Pacífico, que debía facilitar las exportaciones brasileñas desde el puerto de Santos hasta Ilo (Perú) y su posterior conexión con los mercados de Asia, en particular, el de China, uno de los más grandes del mundo.

Hace cuatro años, la presencia del mandatario español permitió activar la cooperación española que, con su correspondiente contraparte del Estado boliviano, debía llegar a los $us 124 millones para proyectos de agua potable y de riego para la producción agrícola.

El embajador español explicó que su país continuará con esta ayuda para ese rubro, esta vez en el marco de la “transición ecológica justa”. “Ambos países somos conscientes de la importancia que hay que dar a la lucha contra el cambio climático, la protección del medioambiente, la productividad que sea sostenible”, explicó.

El segundo eje es el de la “cohesión social” y tiene que ver con los derechos a la educación y la salud con las contrapartes de colegios médicos, los servicios departamentales y la Universidad Pedagógica de Sucre. En ese marco, también respaldará el acceso universal a la cultura y “el respeto y la puesta en valor del patrimonio cultural, inmaterial y natural del país”.

Polarización

El tercer capítulo de la cooperación española tiene que ver con la necesidad de fortalecer las capacidades institucionales del país, especialmente después de la crisis política de 2019 y de cara a los próximos procesos electorales nacionales. Eso sí, sin descuidar la lucha contra la violencia machista.

“Vamos a continuar apoyando al Tribunal Electoral junto con otros socios, como el PNUD de Naciones Unidas, en apoyo al TSE en distintas líneas, por ejemplo, en el área de comunicación y la digitalización de sus capacidades. Y sobre todo con el intercambio de experiencias con otros tribunales electorales”, señaló el embajador.

Tras ser consultado sobre el apoyo en favor, precisamente, de la gobernanza en tiempos de polarización política, Javier Gassó señaló que su país respaldará el fortalecimiento institucional de Legislativo y las iniciativas en favor de formación de jueces y fiscales. Precisó, en este escenario, que no recibió solicitud para actualización del padrón electoral.

Fuente: El Deber

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