La dirigencia nacional del magisterio urbano adelantó ayer que reanudarán las movilizaciones con nuevas estrategias y el respaldo de más sectores sociales en demanda de su reivindicaciones laborales urgentes.
Tras nueve semanas de protesta, los maestros urbanos determinaron un cuarto intermedio, hace dos semanas, y ahora se alistan para rearticularse en la Conferencia Nacional del Magisterio Urbano, que se llevará adelante mañana y el jueves en Aiquile, en Cochabamba.
El dirigente José Luis Álvarez señaló que el Consejo Consultivo Paceño determinó la suspensión del cuarto intermedio y la reanudación de las movilizaciones en demanda de respuestas administrativas urgentes por parte del Gobierno, como el ascenso de categoría. “Ya es hora de que volvamos a las calles”, sostuvo.
La secretaria ejecutiva de la Federación del Magisterio Urbano de Cochabamba, Griselda Torres, se refirió a las demandas inmediatas que el Ministerio de Educación debe atender, como el perjuicio de unos 8 mil profesores que no pueden ascender de categoría.
Otra de las molestias del sector es la persecución política de los dirigentes movilizados durante las nueve semana de protesta.
Torres denunció que los maestros son víctimas de amenazas de procesos administrativos, como el caso de los ejecutivos de Sucre y de Potosí, Efraín Villalpando y Eloy Velasquez. “De esta manera, se vulnera flagrantemente el fuero sindical que es una conquista de los trabajadores”, indicó.
Además, exigen el derecho al bono de antigüedad y el respeto al ascenso automático de los trabajadores, beneficio que se encuentra vigente en el Reglamento del Escalafón Docente.
La ejecutiva señaló que se conmina al Ministerio de Educación a publicar la convocatoria del examen de ascenso, “porque de otra manera se atenta el derecho voluntario que tienen los maestros de dar examen de ascenso de categoría cada cuatro año para mejorar sus condiciones salariales”.
Álvarez mencionó la necesidad de articularse con los padres de familias, con los sectores que rechazan la Gestora Pública y con quienes se niegan a la jubilación forzosa para protestar de forma contundente y que se logre la atención del Gobierno central.
“Urge la necesidad de unificar la lucha de todos los sectores bajo un pliego de reivindicaciones que exprese la necesidad de los trabajadores de defender nuestros derechos y conquistas”, enfatizó el dirigente.
Fuente: Los Tiempos
