Misión de DDHH de la ONU se retira y Gobierno descarta su expulsión

Foto: ED

Comunidad Ciudadana asegura que se expulsó al Alto Comisionado para Derechos Humanos del país. El ministro Lima dice que el convenio con esta misión terminó. Su trabajo puede ser desde Chile o Ginebra.

El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos se retiró de Bolivia y desde el 1 de enero de este año ya no trabaja en el país. La oposición denunció que el Gobierno expulsó a la misión internacional y que el Movimiento Al Socialismo (MAS) tiene un “plan negro” contra los derechos humanos. El Ejecutivo negó que se haya expulsado a la oficina y afirmó que el convenio con esa organización terminó el 31 de diciembre de 2022. 

La semana pasada fue la última de trabajo de Antonio Menéndez de Zubillaga y su equipo. Él fue el representante del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Oacnudh) en Bolivia. Ayer evitó dar declaraciones a este medio y dijo que “por ahora” no puede referirse al asunto. 

Sin embargo, una fuente diplomática confirmó que esta misión abandonó el país tras una instrucción de la oficina en Ginebra, en Suiza. Esta fuente no dio detalles si fue una expulsión, un retiro voluntario o la finalización del acuerdo. 

“Lo que le puedo decir es que esa misión salió del país, ya no trabaja desde la semana pasada”, detalló el diplomático. 

Ayer, la bancada de Comunidad Ciudadana (CC) denunció que el Gobierno dispuso el retiro de Bolivia de la misión técnica de la Oacnudh y que el MAS tiene un “plan negro” en contra de los derechos humanos del país. 

Andrea Barrientos, jefa de bancada de CC en el Senado, es quien acusó al oficialismo de aplicar un “plan negro” para generar desprotección absoluta de la ciudadanía, que protesta por las “vulneraciones” cometidas en las últimas semanas, sobre todo en Santa Cruz.

“Lo que queremos denunciar es un plan negro que ha creado el Movimiento Al Socialismo para cortar los derechos humanos de los bolivianos, un plan macabro que organizan. Se ha retirado al Alto Comisionado (de Naciones Unidas) para los Derechos Humanos de Bolivia, exigimos que se confirme esta información, de ser cierto, este plan macabro se cumple a la perfección”, afirmó Barrientos a este medio. 

Representante permanente

Bolivia contaba con un representante permanente de esa instancia internacional hasta 2017, cuando finalizó el convenio. Era Dennis Racicot el que terminó ese acuerdo de permanencia y luego, en 2020, se habló de la posibilidad de reinstalar una oficina. Se logró un nuevo convenio que, según el Gobierno, terminó el 31 de diciembre del año pasado. 

“Primero eligen a un Defensor del Pueblo en una sesión irregular, que no abre la boca frente a las vulneraciones de derechos humanos, ya en el pasado se sacaron a instituciones de defensa de derechos humanos y ahora sacan al Alto Comisionado, hecho que nos deja en indefensión absoluta”, agregó Barrientos. 

Antonio Menéndez de Zubillaga, de origen español, fue el último representante del Oacnudh en Bolivia. El funcionario internacional firmó varios convenios con el Estado boliviano, entre ellos el protocolo de seguimiento a procesos judiciales en febrero de 2022. Ese acuerdo fue firmado con el ministro de Justicia, Iván Lima. 

Fue Lima quien aseguró que la misión del Oacnudh en Bolivia no fue expulsada y que la salida de esta instancia se debe a que el acuerdo de permanencia feneció el último día de 2022. 

“El acuerdo que teníamos era vigente al 31 de diciembre del año pasado y no se ha renovado, (pero) eso no significa ninguna expulsión sino una forma de trabajo que tenemos con ellos y que vamos a mantener”, dijo Lima.

El ministro atribuyó esta nueva salida a “temas administrativos” y afirmó que espera se solucionen para evitar cortar el trabajo permanente de esta instancia. Además, Lima recalcó que la intención del Gobierno es seguir en el marco del sistema universal de derechos humanos y su relación con la oficina de Naciones Unidas en Ginebra, Suiza. 

“Comunidad Ciudadana distorsionó una información administrativa. No se expulsó a nadie y, repito, el acuerdo concluyó. Sin embargo, ratificamos que el Gobierno boliviano mantendrá el diálogo con el sistema universal y el interamericano de derechos humanos”, insistió Lima. 

La autoridad añadió que para el futuro se están viendo varias variables de trabajo con el Oacnudh, ya sea con la oficina en Chile, desde Ginebra o una oficina permanente en Bolivia.

El 13 de febrero de 2007 se suscribió un acuerdo entre el Gobierno y la Oacnudh para el establecimiento de una oficina en Bolivia. El acuerdo fue ratificado mediante Ley Nº 3713 del 13 de julio de 2007 y renovado dos veces, una en agosto de 2010 y otra en agosto de 2013, según la página web del organismo.

Luego, cuando Racicot abandonó el país no se estableció una oficina permanente y solo se trabajó con convenios y representantes interinos. El último fue Menéndez de Zubillaga, quien la semana pasada dejó el país. 

Menéndez enfocó su trabajo en varios temas, pero destacó la defensa de los derechos de las personas privadas de libertad, casos particulares en la lucha contra la discriminación y racismo o la defensa de las víctimas de vulneración de sus derechos.

Fuente: El Deber

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