El ministro de Gobierno, Arturo Murillo, apuntó este viernes al expresidente Evo Morales por incitar a los dirigentes del Trópico de Cochabamba a cometer actos vandálicos y expulsar de la zona a los efectivos de la Policía Boliviana.
La reacción surge luego de que anoche los pobladores del municipio de Shinahota hostigaron y expulsaron a los uniformados de la zona, según videos que circulan en redes sociales. Horas antes, algunos dirigentes cocaleros del Trópico de Cochabamba habían dado 24 horas a los policías para salir de la zona, porque no se había coordinado su retorno, efectuado apenas hace dos días.
El ministro Murillo responsabilizó a los dirigentes cocaleros y a algunos alcaldes de la región, que son afines a Evo Morales, por la violencia generada contra los policías y por la vulneración de la cuarentena sanitaria contra el coronavirus (Covid-19).
“No tengo ninguna duda, Evo Morales es un hombre que se alimenta con la muerte, que se alimenta con la violencia, toda la vida lo ha hecho y lo sigue haciendo”, señaló Murillo.
El ministro Murillo afirmó que el exmandatario en noviembre del año pasado y en gestiones anteriores de su gobierno generaba las muertes de sus propios compañeros exponiéndolos en las carreteras para victimizarse, sin importarle la vida de los demás.
Murillo refirió que ahora un grupo de dirigentes del MAS buscan aplicar la misma estrategia en Shinahota, provocar a la Policía para generar muertes entre sus pobladores. Pero no se caerá en ese plan, porque desde el actual Gobierno se cuida la vida, remarcó.
Según la autoridad, no se puede entablar dialogo con quienes sólo buscan confrontación, por eso, activarán acciones legales contra quienes pusieron en riesgo la salud y la vida la población y “han querido flagelar a los policías”.
Murillo informó que el Comandante de la Policía interpondrá una querella penal contra los responsables de este hecho y también desde el Ministerio de Gobierno se presentarán las denuncias correspondientes.
“Vamos a hacer que todo el peso de la Ley caiga sobre estos delincuentes políticos que lo único que están buscando es generar muertos a costa de su población. No les importa su población, no les importa que puedan contagiarse con el coronavirus y están poniendo en riesgo a toda su población. Condenamos estos actos”, manifestó.
Anunció que seguirán los patrullajes conjuntos entre policías militares por la zona del Trópico de Cochabamba.
Por su parte, el ministro de Defensa, Luis Fernando López repudió lo hechos de violencia en Shinahota y anunció que seguirán luchando por la vida de cualquier ciudadano frente a la pandemia del Covid-19.
“Ante esta actitud beligerante, mal intencionada, la única respuesta que van a tener es seguir preocupándonos por la salud de los bolivianos, seguir patrullando como lo hemos hecho en toda Bolivia, conversando con aquellos bolivianos que realmente aman la vida. No se les va dar el gusto a la violencia”, señaló López.