El senador del MAS, Leonardo Loza, salió a defender al jefe de su partido con vehemencia ante las críticas de disidentes de su partido como la alcaldesa de El Alto, Eva Copa.
“Ellos se retiraron del MAS. Son traidores del pueblo. Abandonaron al MAS. Tienen otro partido político y no tienen nada que hacer con el Movimiento Al Socialismo. No metan su pico donde no tienen que meterlo. Trabajen donde son autoridades” demandó el legisladore en una rueda de prensa.
El jueves, la expresidenta del Senado después de una reunión con el vicepresidente David Choquehuanca manifestó que el ciclo de Evo Morales ha terminado.
“Ha sido un expresidente, ha sido un líder indígena, nosotros lo hemos respaldado, pero creo que su ciclo ha concluido. Creo que tiene que dar paso a nuevas generaciones” manifestó Copa.
Después pidió al exmandatario que deje trabajar al presidente Luis Arce. “Está (Luis Arce) tratando de levantar la economía en el país, pero cada vez que él (Evo Morales) interviene, lamentablemente hace que haya mayor susceptibilidad y que el Movimiento Al Socialismo esté cada vez quebrándose más”, dijo.
Estas declaraciones indignaron a Loza que dijo que ésta no tiene “ninguna moral” para hablar de Evo y del MAS porque se fue del partido.
“Lamento las declaraciones de nuestra hermana alcaldesa de la ciudad de El Alto. Ella ya no es del MAS, se retiró del MAS, abandonó, ahora no tiene ninguna moral ni principio para hablarnos del MAS. Dedíquese a trabajar por El Alto” exhortó después de mencionar algunos calificativos en contra de su excompañera de partido.
Después se refirió al diputado Rolando Cuéllar, expulsado del MAS por el entorno de Morales, que se reunió con el presidente Luis Arce y se tomó una fotografía.
“Se tomaron foto seguramente los que querían uno por uno, y ahí lamentablemente colocan titulares. Así que es una reunión como con cualquier otra bancada y eso no repercute en algunos temas internos que tiene ese compañero con el MAS” explicó.
Morales afronta fisuras internas en su partido después de 14 años en los que nadie, al menos públicamente, cuestionaba su liderazgo.
Él consideró que en su partido no hay división sino traición.
Fuente: Brújula Digital
