El presidente del Consejo de la Magistratura, Marvin Molina, afirmó que hace diez años que no se hace una evaluación a los jueces del Órgano Judicial, porque la reforma del año 2010 le cercenó el Subsistema de Evaluación, mientras que el Subsistema de Capacitación fue transferido a la Escuela de Jueces.
Sin embargo, tiene conocimiento que casi el 50% de los jueces en todo el país son transitorios, que no han salido de una Escuela de Jueces, menos fueron promovidos en virtud a una convocatoria, lo cual ha merecido observaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y el grupo de expertos que llegaron al país.
Hace una semana, el ministro de Justicia Iván Lima anunció que este año se evaluarán a los 1.138 jueces como un punto de partida para la renovación total de los administradores de justicia.
Molina sostuvo que para mejorar la justicia es imperativo la reforma de la Ley 025 del Órgano Judicial, considerando tres componentes: normativo, humano y social, porque si se parte con las mismas reglas que actualmente funciona ese poder del Estado, no se podrá mejorar el funcionamiento de la justicia, advirtió.
Explicó que, por mandato constitucional, el Consejo es el responsable del régimen disciplinario, del control y fiscalización del manejo administrativo y financiero del Órgano Judicial, pero la reforma del año 2010 le restó facultades sobre el manejo de recursos económicos, incluso para tener una Unidad de Auditoría Interna.
Sostuvo que la lógica de Ley 025 era otorgar independencia al manejo administrativo financiero del Órgano Judicial, quitándole la Gerencia Administrativa al Consejo y creando una Dirección como unidad desconcentrada del Tribunal Supremo de Justicia, pero que en realidad lo que hicieron fue crear “un monstruo administrativo”, comento en el programa “La Mañana en Directo” de la red Erbol.
Dijo que cuando se creó el Consejo de la Magistratura, la visión de funcionamiento era tener unos 45 funcionarios, pero hoy en día tiene más de 500 servidores que incluso duplican algunas funciones del propio Consejo.
Indicó que se ha desnaturalizado las funciones y atribuciones del Consejo, situación que puede ser solucionada en virtud a la próxima Cumbre de Justicia y a la buena relación que existe con los magistrados con quienes hasta hace poco estaban divorciados.
Fuente: Erbol