El director del Servicio Departamental de Salud (Sedes) de Santa Cruz, Marcelo Ríos, informó que la empresa Makiber, que lleva adelante la construcción del hospital de tercer nivel de Montero, permitió que se abran las puertas para que el personal de salud ingrese a acondicionar los ambientes con insumos médicos y medicamentos. Se estima que el nosocomio comience a atender mañana, de manera parcial, a los pacientes con COVID-19.
“Nos han permitido ingresar con los materiales, como medicamentos, insumos y equipos de protección personal, que es lo que necesitábamos para poder hacer que se vaya instalando el equipo médico. Esto era lo que nos faltaba para que el personal pueda utilizarlo en los pacientes, y esperamos que en las próximas horas podamos dar el visto bueno para autorizar la referencia de los pacientes”, explicó Ríos.
Añadió que para el ingreso de los pacientes, se verá la forma clínica de la patología y los primeros días solamente ingresarán pacientes con síntomas leves, “entonces no podemos arrancar todavía con terapia intensiva porque eso requiere que el hospital engrane sus actividades y se entienda su manejo completo”, destacó el galeno.
Recordó que la capacidad del centro de salud es de 200 camas, pero a partir de hoy se habilitara un área de 34 camas, donde se estima recibir a 10 pacientes con los que se engranará el equipo de salud, “y en la medida que pasen los días se ira abriendo cada vez más su capacidad”, aseguró.
Se estima que a partir del viernes comiencen a ingresar los primeros pacientes, previa evaluación de los galenos en los otros centros de salud, ubicados en la capital norteña, donde se encuentran los pacientes con COVID-19.