Las subvariantes son más contagiosas que las anteriores, de acuerdo con los especialistas. Recomiendan continuar con las medidas de bioseguridad para evitar contagios y piden recibir las vacunas.
Con más del 200% de incremento de casos de covid, el Gobierno anunció ayer que Bolivia ingresó a la sexta ola de la pandemia. Además, el Ejecutivo informó que en el país circulan cuatro subvariantes de la ómicron y se estima que el pico de la enfermedad llegará hasta mediados de enero.
“Esta semana (epidemiológica, la 48) se reportaron 1.608 casos, lo que significa que respecto a la anterior (la 47) hubo un incremento de 203% a nivel nacional. Con esta cuarta semana consecutiva de incremento de casos, recién podemos anunciar el inicio de la sexta ola”, explicó ayer el Ministro de Salud y Deportes, Jeyson Auza.
La autoridad aseguró que evidentemente en las pasadas tres semanas hubo un ascenso sostenido, pero esta semana se reportó un ascenso mayor. “Esto se debe a la presencia de las nuevas subvariantes que fueron detectadas mediante secuenciación genómica, es decir, las subvariantes BQ de la ómicron”, dijo.
La semana pasada, el Ministro de Salud explicó que las subvariantes BQ.1 y BQ 1.1 ya circulan en el territorio nacional.
Según el epidemiólogo Álex Contreras, no sólo circulan esas subvariantes, sino también la BQ 1.3 y la BQ 1.8, que fueron identificadas en los últimos días. “Todas esas son sublinajes de la variante BA.5 de ómicron que se está subdividiendo ese linaje y está dando pie a estos sublinajes”, indicó el técnico.
De acuerdo con el epidemiólogo que forma parte del grupo de profesionales del Ministerio de Salud, todo el país registró un incremento de casos, pero Santa Cruz, Cochabamba, La Paz y Pando reportaron “un aumento superior”.
El Ministro de Salud indicó que estas subvariantes aún no son dominantes, pero dijo que poco a poco se pueden convertir en las predominantes en el país.
Según Contreras, estas subvariantes se caracterizan por tener “un alto nivel de transmisibilidad”, porque de acuerdo con informes las mismas alcanzan un 30% más que sus predecesoras.
Si una persona se contagia con esta subvariante, puede presentar síntomas como: tos, dolor de garganta, fatiga, fiebre, cefalea y dolores musculares, además podría volver la pérdida del olfato y del gusto.
Además, los pacientes tienen sensación de falta de aire y dolores gastrointestinales. Pueden presentar la aceleración del ritmo cardiaco.
El pico más alto
Pese a que no existe una fecha exacta, se prevé que el pico de la sexta ola será hasta la primera quincena de enero de 2023.
“Debido a que estas subvariantes de la ómicron son más contagiosas y las fiestas de fin de año –donde existen conglomerados de personas– se prevé que para la primera quincena de enero, Bolivia podría estar en el pico más alto de la pandemia”, aseguró el epidemiólogo Rudy Céspedes.
Con una postura similar, Contreras aseguró que, de acuerdo con datos, se estima que “entre la última semana de diciembre y la primera quincena de enero, (el país) estaría llegando al pico (de la sexta ola)”.
Ante esta situación, los expertos afirmaron que es importante continuar con el uso del barbijo, el lavado de manos y el distanciamiento social. Además, los especialistas recomendaron la aplicación de la vacuna.
Hace una semana, los expertos indicaron que la cuarta dosis de la vacuna reduce los efectos de las variantes del covid.
Fuente: Página Siete