La Caja Nacional de Salud (CNS) informó ayer martes que, en sus diferentes regionales, están evaluando alquilar clínicas y comprar infraestructura grande para la atención de sus asegurados.
Adquirir infraestructura. “En todos los departamentos se está viendo la posibilidad de alquilar ambientes, alquilar clínicas y, también, nace la propuesta de alguna departamental sobre la posibilidad de adquirir infraestructura grande para poder soportar la demanda de atención de COVID-19 como de otros pacientes”, indicó el gerente general de la CNS, Roberto Rojas.
El anuncio se realizó después de que el ministro Arturo Murillo manifestó que la Caja no abastece a todos sus afiliados, por lo cual tendrá que asumir el costo de intervenir establecimientos privados.
El gerente de la CNS reconoció que hay saturación y reiteró que “si es necesario comprar alguna infraestructura, lo vamos a hacer para que nuestra población asegurada esté bien atendida”.
Señaló que incluso, en las próximas horas, se podría concretar acuerdos con un hotel y una clínica en La Paz.
A su turno, el presidente del directorio de la CNS, Marcos Salvatierra, destacó desde la pandemia se ha dispuesto un presupuesto de 425 millones de bolivianos para adquirir insumos y equipos.
No obstante, se reconoció que hay dificultades en hacer las compras por temas como la escasez y bajas en el personal.
En cuanto a las largas filas que se han registrado para la toma de pruebas COVID-19, el gerente de la CNS informó que se está a la espera de que el Ministerio de Salud apruebe el protocolo para realizar los tests en la modalidad Elisa. Indicó que así se podrían disminuir las colas considerablemente.
El Día
